Uruguay no ha utilizado la cuota sin arancel para exportar leche en polvo a México. El cupo fue aprobado en 2012, reglamentado en 2013 con un gradual ascenso en el volumen que se podrá colocar sin pagar arancel. Para 2014 el cupo fue de 5.000 toneladas. El acuerdo bilateral permitiría ir hasta un cupo de 11.000 toneladas aunque se está muy lejos todavía de llegar a un volumen mínimo.
Fuentes del Instituto Nacional de Leche explicaron a Conexión agropecuaria que algunas características de la reglamentación del cupo restringen el comercio. En primer término, el uso del cupo lo administra el país de destino (México).
En segundo lugar, el 40% del cupo corresponde a una sola empresa, Liconsa SA. Si esta firma no utiliza su parte de la cuota (2.000 toneladas), lo libera tarde en el año, cuando ya es tarde para renegociar con otras industrias.
Otro factor que limita el comercio es que solamente pueden importar leche en polvo las industrias mexicanas. Esto es, se compra como un insumo y no como el producto final.
A esto se suman cuestiones de mercado que hacen difícil exportar a ese país. “Por una cuestión de precio es muy difícil competir con la leche en polvo de producción interna y con la leche en polvo descremada estadounidense”, explicó la fuente.
“Todas estas condicionantes hacen perder el interés industrial de exportar bajo este sistema, y en la vía de los hechos no ha sido utilizado”, concluyó.
*Liconsa S.A. es una compañía paraestatal del gobierno mexicano dependiente de la Secretaría de Desarrollo Social. Fundada como parte de los programas de abasto social, su función es industrializar y comercializar leche de calidad óptima a precios accesibles para contribuir a la alimentación, nutrición, desarrollo físico y mejoramiento en calidad de vida de las clases más necesitadas y/o vulnerables.
