Cerca de un centenar de camiones están trancados en el paso de frontera que comunica Rivera con la localidad brasileña de Livramento. Las demoras obedecen a dos razones: por un lado la aplicación de la «operación padrón» (trabajo a reglamento que desde hace dos meses aplican los funcionarios de organismos de contralor aduanero de Brasil) y por otro a un feriado en el país vecino por el cual no hubo actividad en la frontera.
Entre los operadores existe inquietud en virtud de que «la medida no parece tener una pronta resolución», en virtud de que «las autoridades brasileñas se muestran indiferentes y las autoridades uruguayas, parecen no tomar nota de la situación», afirmó a El País Roberto Araújo, presidente de la Asociación de despachantes de Aduana de Rivera.
La estimación es que varios de los camioneros van a demorar dos o tres días para poder seguir viaje. Las medidas adoptadas por los funcionarios del Ministerio de Agricultura afectan a quienes transportan cereales, frutas, carne y lácteos.
Por otra parte, el presidente de la Cámara de Autotransporte Terrestre Internacional del Uruguay (Catidu), Mauro Borzacconi, informó a El País que ayer en el lado brasileño de la frontera de Chuy hubo problemas informáticos que también produjeron retrasos para el cruce de camiones.
A su vez, esta gremial de transportistas evalúa presentar una nota ante la Dirección General Impositiva (DGI) y el Ministerio de Economía (MEF), advirtiendo sobre una nueva modalidad para el cobro de los fletes adoptada por empresas argentinas. Estos transportistas exigen el cobro del viaje en Uruguay y en dólares en efectivo. Luego cambian la divisa en el mercado paralelo argentino del «blue», aprovechan la diferencia con el tipo de cambio oficial y por ese motivo ofrecen servicios más baratos.
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