Productores enfrentan nueva reducción en precio de la leche, a pesar de que todavía no empieza temporada lluviosa que incrementa oferta.
Los productores de la zona central del país están preocupados por la reducción de entre uno y cuatro córdobas por galón que se aplicó desde la Semana Santa al precio al que se les paga la leche, merma que es atribuida por la industria a la reducción de la demanda de queso en el mercado salvadoreño y a la pérdida de calidad que sufre la leche durante el verano.
Esta es la segunda rebaja que aplican los acopiadores durante este año. En enero, el galón de leche se cotizaba entre los 52 y 55 córdobas, pero con la disminución de entre seis y 12 córdobas bajó a entre 43 y 46 córdobas por galón; mientras el precio del queso pasó de cuarenta a más de sesenta córdobas por libra, situación de la que se culpó a los intermediarios.
Según Agustín Sequeira, presidente de la Cooperativa de Productores Agropecuarios de Acoyapa, ahora las plantas de Centrolac, Nilac y La Perfecta (Parmalat) además de reducir al menos en diez por ciento el acopio en algunos lugares que pagaban a 13 córdobas el litro (49 el galón), lo bajaron a 11 (41.60 el galón) y amenazan con bajar otro córdoba, refirió.
“Eso nos tiene metidos en caos a los productores lecheros porque ya van dos años consecutivos que nos dan ese golpe en una temporada que debiese subir el precio de la leche”, lamentó Sequeira.
Según el directivo de la cooperativa, el volumen de acopio que mantienen en invierno es de cincuenta mil litros, pero en esta temporada baja a 25,000 y con esa voluntad de la industria de bajar el precio y volumen “es un golpe, un daño a la economía de los ganaderos”.
ANTES SUBÍA EN EL VERANO
Nardo Sierra Carrillo, pequeño productor de Espavel, Muelle de los Bueyes, explicó que el precio de la leche se había mantenido en 45 córdobas el galón, sin embargo antes de Semana Santa la industria bajó dos córdobas, es decir pagaron a 43, y seguidamente a 42, incluso a algunos productores les pagan a cuarenta córdobas por galón.
“Históricamente esta es la época en que se pone más cara la leche, independientemente que no sea su precio real en base a los costos de producción, pero aducen que la leche es rala (con poca grasa), no es justificación”, sostuvo Sierra al señalar que venden a la industria seiscientos galones de leche mensuales.
Wilder Miranda, presidente del acopio de la Cooperativa de Pequeños y Medianos Productores de Santo Domingo, Chontales, aseguró que Centrolac les está manteniendo el volumen de acopio, alcanzando al momento 7,200 litros.
No obstante, reconoció la baja de un córdoba en el precio, “pero nos mantenemos súper bien, estábamos peor hace dos años en manos de los manteros” (productores de queso artesanal), manifestó.
LA PERFECTA NIEGA
El gerente de La Perfecta, Jorge González, negó que la empresa haya aplicado una reducción generalizada y aseguró que es la industria artesanal, es decir “el mercado informal”, el que redujo los precios porque ha visto reducida la demanda de queso en el mercado salvadoreño.
Dependiendo de la calidad, La Perfecta mantiene a sus proveedores un precio estable de entre 11 y 12 córdobas por litro, es decir entre 41.60 y 45.40 córdobas por galón, asegura.
Las variaciones en el precio dependen —según González— de la calidad de la leche que entrega el productor en cada finca.
Por su parte, Álvaro Aguilar, directivo de la Cooperativa de Procesadores Lácteos Centroamericanos, confirmó la reducción de entre uno y cuatro córdobas por galón de leche a sus proveedores.
“Estábamos pagando 46 córdobas y bajamos a 42 porque en esta época el mercado salvadoreño se pone malo y al bajar las ventas tenemos que bajar el precio. Además, en el verano nuestros rendimientos se bajan considerablemente”, afirmó Aguilar.
Dicha cooperativa aglutina a 12 plantas procesadoras de queso de la zona de Chontales, que en conjunto acopian hasta ochenta mil galones diariamente (302,800 litros).
COMPENSAR BAJAS VENTAS Y MENOR RENDIMIENTO
Según Aguilar, además de la caída de la demanda en el mercado salvadoreño, en el verano la ingesta de pasto seco incide en la reducción del porcentaje de grasa de la leche y esto a su vez en la producción de queso.
“En invierno por cada galón de leche obtenemos 1.40 libras de queso, es decir casi libra y media, pero en verano el galón solo nos da 1.10 libras entonces tenemos que reducir el pago de la leche para compensar eso”, explica Aguilar.
Otro fenómeno que se está presentando es que las plantas, tanto industriales como artesanales, han comenzado a exigir una mayor calidad del líquido y la reducción de esta se penaliza en el precio.
Aguilar estima que en unas dos semanas el precio puede recuperarse y mantenerse durante la época lluviosa que iniciará en pocas semanas.
ORDENAMIENTO ES URGENTE
Para Willmer Fernández, presidente de la Cámara Nicaragüense del Sector Lácteo (Canislac), “esta problemática de los bajones de precio solo se resolverá con el ordenamiento del sector”. Anteriormente se aplicaban durante la entrada de la temporada lluviosa, como respuesta al incremento de la oferta que provocaba el supuesto “golpe de leche”.
Pero ahora muchos lo están atribuyendo a que los productores en su afán de prepararse para enfrentar el verano planearon la parición de sus reses para esta época y han concentrado mucho ganado en la zona de Chontales y las Regiones Autónomas del Caribe Norte y Sur, donde hay muy buena oferta de alimento. Eso ha elevado la oferta de leche en la zona.
“Pero estas son presunciones de los técnicos… Pero no hay una fuente fidedigna que aclare lo que en realidad está pasando”, sostiene Fernández.
Canislac lamenta que a pesar de múltiples peticiones a distintas instancias del Gobierno hasta ahora no se haya hecho nada para ordenar el sector y para encontrar mecanismos que permitan concretar este ordenamiento.
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