El secretario de Agricultura de Estados Unidos, Tom Vilsack, ha renovado un acuerdo con los productores lácteos de Estados Unidos para acelerar la adopción de proyectos de generación de energía a partir de los desechos y mejoras en el rendimiento energético de las granjas lecheras del país. Con este pacto se extiende un acuerdo firmado en Copenhague (Dinamarca), en 2009.“Mediante la renovación de este compromiso, el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) y el Centro de Innovación de Estados Unidos para Productos Lácteos continuarán las investigaciones que ayudan a los productores de leche a mejorar la sostenibilidad de sus operaciones”, dijo Vilsack. “Esta importante investigación también apoyará a la industria láctea en su objetivo de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 25 por ciento para el 2020”.
Vilsack firmó el acuerdo el 24 de abril en la Casa Blanca con representantes del Centro de Innovación en Productos Lácteos de Estados Unidos y Dairy Management. Uno de los objetivos es aumentar la construcción de digestores anaeróbicos y explorar métodos innovadores para utilizar productos que antes se consideraban corrientes de desecho de la producción de lácteos.
En 2008, la empresa Dairy Management Inc., la Federación Nacional de Productores de Leche y la Asociación Internacional de Productos Lácteos lanzaron la iniciativa de sostenibilidad de productos lácteos de Estados Unidos para acelerar la innovación y crear confianza pública en el compromiso de la industria de suministrar a los consumidores productos nutritivos de manera viable a nivel económico, segura para la ambiente y responsable con la sociedad. Mediante el Centro de Innovación, los líderes de casi el 80 por ciento de la cadena de suministro de productos lácteos (que incluye productores, cooperativas y asociaciones, procesadores, fabricantes y marcas de lácteos) han avalado la campaña. Su primera prioridad es reducir la emisión de gases de invernadero y, en 2009, establecieron el objetivo de que en toda la cadena de valor se redujeran estas emisiones en 25 por ciento para el año 2020. A la industria se unieron expertos nacionales e internacionales de organizaciones académicas, gubernamentales y científicas.
Desde que se firmó el acuerdo en 2009, USDA ha concedido cerca de 180 subvenciones para financiar la construcción de sistemas de digestores anaeróbicos. Estos sistemas capturan el metano y producen energía renovable que se puede utilizar en las granjas y vender en la red de suministro eléctrico. USDA también ha concedido cerca de 140 préstamos y donaciones para que los productores de leche desarrollen otros tipos de sistemas de energía renovable y de rendimiento energético.
Desde 2009 el Servicio para la Conservación de Recursos Naturales (NRCS) de USDA ha entregado 257 millones de dólares en financiamiento para ayudar a que más de 6.000 granjas lecheras implementen prácticas de conservación que mejoren la sostenibilidad. El apoyo que NRCS brinda a la industria láctea ha resultado en 354 auditorías de granjas y plantas en materia energética, así como 18 subvenciones para la innovación en conservación para proyectos de productos lácteos durante los últimos tres años.
La tecnología de digestores anaeróbicos es un método comprobado para capturar el metano de los productos de desecho, como el estiércol, y convertirlo en calor y electricidad, dice USDA. La tecnología utiliza generadores alimentados con el metano capturado. Las operaciones con digestores anaeróbicos habitualmente generan electricidad suficiente para cientos de hogares cada año.
El metano solo se ve superado por el dióxido de carbono como contribuyente atmosférico al cambio climático. También es el componente principal del gas natural y los países de todo el mundo están trabajando de manera conjunta para utilizar las nocivas emisiones de metano como fuente de energía limpia.
Durante 200 años, las concentraciones de metano en la atmósfera se han más que duplicado debido principalmente a la actividad humana. El metano es 23 superior al dióxido de carbono para atrapar el calor, por lo que reducir las emisiones de metano es un buen método a corto plazo para abordar el calentamiento mundial, dijo USDA.
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