Si los metales pesados se encuentran en el suelo y en el agua con que se riegan los cultivos, aunado a que existen plantas que sirven como alimento del ganado que son capaces de absorber dicho metales y transportarlos a sus tejidos, es lógico pensar que la leche que se produce en la región lagunera contiene arsénico, manifestó Mario García Carrillo, profesor e investigador del Departamento de Suelos de la Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro (UAAAN), Unidad Laguna.
De igual forma comentó que los animales tienen la capacidad de eliminar los metales pesados a través de sus productos, como es la leche, o en su caso la carne si es un ganado de carne, y se pasa por los tejidos acumulados, por algunos órganos o en sus vísceras.
Algunas plantas también son consideradas como acumuladoras o hiperacumuladoras de metales pesados, de ahí que existen algunas consideradas como biorremediadoras, o fitorremediadoras porque absorben metales pesados del suelo o del agua.
Ante esto, se considera que la alfalfa es una planta que absorbe metales pesados del suelo, y si la alfalfa es el principal forraje del ganado lechero, es posible que las vacas estén consumiendo forraje que contiene metales pesados, y que aparezcan en sus subproductos.
Aunque indicó que no tiene estudios previos que comprueben esta teoría, las posibilidades de que exista arsénico en la leche son muchas, sin embargo este problema, lleva ya muchos años presentándose en la Comarca Lagunera.
Pese al tiempo que ha transcurrido sin que nadie haga algo por revertir el problema, dijo que sin duda la presencia del arsénico en el alimento lácteo es grave.
La presencia de dicho mineral en la leche que se produce en la región lagunera continuará mientras que los problemas de arsénico en el agua continúen, puesto que el agua está siendo utilizada para el riego en los cultivos como forraje y la alfalfa, siendo éste ultimo producto agrícola un gran absorbente de metales pesados.
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