El secretario comarcal de la FGAM-CIG de Lugo, Christian López Carmona, que en los últimos meses ha ejercido como portavoz de la plantilla de Alimentos Lácteos, afirmó que los trabajadores se sienten «ofendidísimos» por las declaraciones que realizó el delegado del Gobierno, Samuel Juárez, al decir que él mismo había advertido de que a ese proyecto le faltaba «músculo».
En declaraciones a EFE, López Carmona dijo que suena «a coña marinera» que el delegado del Gobierno, que ejercía como conselleiro de Medio Rural cuando se gestó el proyecto de Alimentos Lácteos, se las dé ahora de «pitoniso», porque «a pesar de las advertencias que pudiera haber hecho», lo que «está claro es que la Xunta siguió poniendo dinero».
El delegado del Gobierno en Galicia hizo esas declaraciones antes de participar ayer en la inauguración del nuevo secadero de jamones del grupo Coren en la planta de Novafrigsa, en Lugo, por lo que López Carmona dijo que «tiene cachondeo» que «el señor Juárez y el señor Feijóo vengan aquí a pavonearse delante de todos los lucenses».
Opina que ambos «deberían tener un poco de vergüenza, reconocer su error y mirar a quién le dan el dinero, porque aunque tengan amigotes deben invertir el dinero público con unas ciertas garantías».
«Seguimos teniendo una fábrica vacía y unos trabajadores que se van a la calle. No escuché a nadie hablar de buscar soluciones para esto, a pesar de que no tuvieron dolor por darle a sus amigotes más de siete millones de euros y dejar columpiados a cargo del capital social de la empresa a un montón de ganaderos y de cooperativas», afirmó.
«Hay que tener un poco más de vergüenza. La gente está ofendidísima por esas declaraciones», concluyó.
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