Urgen a Agricultura una solución a la inversión «millonaria» en la compra de cuota en los últimos 20 años – Las industrias ya están pagando primas por volumen de entregas.
Quedan poco más de 13 meses para que el 1 de abril de 2015 desaparezca el sistema de la cuota láctea, que desde hace 30 años establece para cada país de la UE un máximo de producción de leche. En un mercado futuro en el que la norma será la oferta y la demanda, el líder europeo en producción, Alemania, ya ha aumentado su censo de vacas y cerró 2013 con 4,3 millones de cabezas, la cifra más alta desde el año 2004.
Pero los ganaderos alemanes no son los únicos que se están preparando para dentro de un año. La comarca dezana, en la que se concentra buena parte de la producción gallega, aprovecha estos meses de «aterrizaje suave» para estudiar cómo producir más con menos coste. Cobideza, la cooperativa de Cercio (Lalín) produce hoy en día 27 millones de litros de leche, y ha subido el volumen un 6% desde el mes de julio. Eso sí, su presidente, Román Santalla, explica que en el primer semestre del año pasado la producción había bajado un 4%, debido sobre todo a los malos precios y a un descenso en la calidad de la alimentación -cuestiones que afectaron a todo el sector a nivel estatal-. Cobideza vende su leche a Reny Picot y en menor porcentaje a Lactalis, y confía que en los contratos que se firmen el próximo 1 de abril (cuando arranca la campaña) «se tenga en cuenta el volumen de producción que tuvimos en 2013». Cobideza va a incorporar más animales, pero quiere que este aumento se produzca en sus 150 explotaciones, y no solo en las más grandes. Por eso, en los últimos meses ofrece asesoramiento para mejorar la producción con cultivos más baratos y más proteicos, como el girasol.
O Rodo, con sede en Rodeiro, es otra de las cooperativas con mayor volumen de socios de Deza, 367, de los que 222 producen leche. Su cuota es de 39 millones de litros, un 11% más que en la campaña anterior «y pese a la pérdida de socios activos», apunta su presidente, José Luis Camiñas. Vende un 70% de esta leche a Peñasanta y el 30% restante lo reparte entre Río, Celta y Hermanos López. Camiñas teme que en un mercado donde impere la oferta y la demanda se produzca un desplome de precios, por eso es urgente que el Ministerio de Agricultura decida ya cómo va a devolver «las inversiones millonarias que hicimos en la compra de cuota en los años 90 y en la década del 2000». Santalla apunta que podría devolverse este dinero en metálico o bien a través de deducciones en la declaración de la renta. «Estas inversiones son las preferentes del rural», recalca Camiñas. Por de pronto, sus industrias ya pagan primas por producción, y no por cuota.
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