El final de las cuotas lácteas, fijado para abril de 2015, abre la cuenta atrás para que 2.500 ganaderías asturianas compitan en un mercado libre.
El sector lácteo se enfrenta a uno de los mayores cambios de su historia. A los 2.500 ganaderos asturianos les queda poco más de un año para aterrizar en un mercado sin cuotas lecheras, los cupos que regulan la producción europea desde los años ochenta. La supresión de los contingentes es visto como «una oportunidad» por el Ministerio de Agricultura y como una posible amenaza por los profesionales asturianos, que estarán forzados a competir en desigualdad de condiciones con los gigantes europeos.
El pasado mes de diciembre se publicaron los reglamentos que regularán la Política Agrícola Comunitaria (PAC) en el período 2014-2020. Una de las disposiciones clave que afectará al sector lácteo es la confirmación de que no se introducirán medidas alternativas de gestión de la producción. Además, los precios de intervención de la mantequilla y la leche desnatada en polvo se mantendrán en los niveles actuales. Eso sí, la Comisión podrá revisar los precios de referencia a la luz de la evolución del mercado, pero cualquier cambio requerirá la aprobación del Consejo y el Parlamento.
El límite máximo de las compras de mantequilla a precio de intervención se incrementará de 30.000 a 50.000 toneladas. Para la leche desnatada en polvo se mantendrá el actual límite máximo de 109.000 toneladas. Si se traspasan esos límites, las compras de intervención se llevarán a cabo a través de un proceso de licitación. Ademas, el período de intervención se extenderá en un mes, del 1 de marzo al 30 de septiembre -actualmente la fecha final es el 31 de agosto-. La Comisión puede volver a abrir la intervención fuera de este período, en situaciones de crisis de mercado.
En el futuro, tampoco continuarán los regímenes de ayudas para el procesamiento de la leche desnatada en caseína y para la utilización de la leche desnatada y la leche desnatada en polvo en alimentación animal. Las restituciones a la exportación permanecerán como herramientas de gestión del mercado, pero sólo se podrán utilizar en el caso de una situación de crisis.
Ante este panorama, el director General de Producciones y Mercados Agrarios, Carlos Cabanas, asegura que la desaparición del régimen de cuotas «puede y debe representar una oportunidad para el sector español». Un sector que cuenta en la actualidad con una producción de 6,5 millones de toneladas y que no cubre su demanda interna, cifrada en 9 millones.
Cabanas destaca el importante esfuerzo de mejora de la dimensión y competitividad de las explotaciones españolas a lo largo de los últimos años, y los retos a los que debe hacer frente en un futuro inmediato. Por eso insiste en la necesidad de que, por parte del sector, se aborden estrategias en ámbitos como la mejora de la competitividad, la eficiencia, la reducción de costes, la diversificación y segmentación en la producción, la internacionalización y el refuerzo de las relaciones intersectoriales. El director general también alerta del posible impacto negativo en el sector de los episodios de volatilidad, marcada en los mercados internacionales de las materias primas para la alimentación animal y de la leche. Para minimizar estos posibles impactos ha subrayado la importancia de los instrumentos con los que cuenta la nueva PAC reformada. También señala la oportunidad que los elementos del «paquete lácteo» tales como contratos y organizaciones de productores e interprofesionales ofrecen como instrumentos de planificación y gestión del mercado.
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