Un papel clave en este crecimiento lo protagoniza, según el último Índice Lácteo de Tetra Pak, un grupo de la población que se caracteriza como «clase media del mañana».
Este grupo abarca aproximadamente el 50% de la población de los países en desarrollo y consume el 38% de los productos lácteos líquidos.
Y su sed de leche aumenta a una velocidad vertiginosa en correspondencia con el aumento de la prosperidad: se prevé que los casi 70.000 millones de litros de 2011 se conviertan hasta 2014 en casi 80.000 millones de litros.
Además, muchos de estos consumidores optarán en los próximos años por los productos lácteos envasados.
Para abrir este atractivo mercado, sin embargo, hay que salvar algunos obstáculos técnicos. Se requieren, así pues, productos asequibles, disponibles y atractivos para las personas de bajos ingresos.
En este contexto se propone el uso de alternativas a la leche entera como el suero de leche o el ácido láctico para producir productos lácteos nutritivos, saludables y económicos, o las presentaciones de envases más pequeños o más sencillos.
