Tras la crisis de los últimos años que hace de la demanda nacional y del consumo de los hogares unos registros con tasas negativas, Danone quiere recuperar rápidamente lo máximo posible de esta pérdida.
Como todas las empresas, en estos tiempos de economía deficiente, lo que Danone intenta es adaptar sus estrategias a los nuevos hábitos de los consumidores.
Dentro de sus planes, las ofertas y las líneas de productos con precios más económicos, son las más empleadas. De hecho, Danone ha sido la última en sumarse a la tendencia low cost.
Por otro lado, aprovechando su renovada apuesta por la tradicional marca Gervais, otra de sus estrategias ha consistido en completar su gama de productos con artículos de precios más reducidos.
No obstante, la empresa matiza que: «no se trata de una nueva campaña sino que esta medida se enmarca dentro de la estrategia que desarrolla Danone cada año, basada en la entrada y salida de diferentes artículos en función de la demanda´´.
Los nuevos productos que actualmente se comercializan en los supermercados con la nueva tendencia de low cost, incluyen desde lácteos básicos, como los yogures naturales y de sabores, hasta los funcionales, es decir, los bífidus, como el yogur griego y las natillas de chocolate y vainilla.
Cabe señalar que este recurso de Danone por apostar por artículos más económicos con los que ganar cuota de mercado, no es algo nuevo, sino que ya en su página web, el consumidor tiene la posibilidad de optar por una treintena de postres con un precio inferior final que comprándolo en los supermercados.
Desde su puesta en marcha, se conoce que Danone concluyó 2013 con un beneficio neto atribuido de 1.422 millones de euros. En esos 12 meses, la facturación ascendió hasta los 21.298 millones de euros. Es decir, esa cantidad representa un incremento del 2,1% frente a los 20.869 millones de euros del ejercicio anterior. No obstante, en términos comparables las ventas se incrementaron un 4,8%.
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