Como irrisorio e insignificante, calificaron diversos productores de las diferentes zonas ganaderas del país, el incremento del 1,2% al precio del litro de leche cruda que anunció ayer el Ministerio de Agricultura y con el cual el Gobierno pretende mejorar el ingreso de más de 300.000 familias productoras.
Para Jaime Bernal, presidente del Comité de Ganaderos del Meta, dicho incremento dista mucho de mejorar los ingresos de quienes se dedican a la producción de leche, si se tienen en cuenta los altos costos de producción que hoy tienen que asumir los productores y la alta competencia que han suscitado los contigentes de importaciones de leche en polvo que ha abaratado los precios del alimento y ha vuelto inviable el negocio.
Tan solo en el 2012, las importaciones de productos lácteos estuvieron por encima de los US$101,7 millones, equivalentes a la compra de 29.384 toneladas.
De dichas compras externas, el principal producto fue la leche en polvo, que contribuye con más del 62% de los productos importados.
En contraste, están los bajos precios que se les paga actualmente a los ganaderos por litro de leche, en un rango de $800 a $1.050, dependiendo la zona del país.
“Un alza del 1,2%, no es más que es un “pañito de agua tibia” que nunca se va a reflejar en los ingresos de los pequeños y medianos ganaderos. Para un pequeño ganadero que tenga 10 vacas con una producción por cabeza de 10 litros, es decir 100 litros mensuales, el incremento que ofrece el Gobierno le va a significar $30.000 más y ese dinero no alcanza ni para comprar un bulto de sal para la alimentación bovina”, sostuvo el dirigente gremial.
Fuerte incremento
El directivo dijo que para cubrir los costos de producción y mantener un margen de utilidad es necesario que los incremento estén en el orden del 15% y 20%.
Y aunque fuentes del ministerio de Agricultura, afirman que esta iniciativa se tomó de cara a los retos que entre otros plantean los TLC, buscando posicionar al sector lácteo colombiano dentro del grupo de países capaces de ofrecer productos lácteos a precios asequibles y con altos estándares de calidad y contribuir a la búsqueda de optimizar los costos de producción y generar economías de escala que permitan lograr precios competitivos en la producción primaria y en los productos lácteos con valor agregado.
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