La meta se alcanzaría con crecimiento orgánico y compra de firmas medianas. Ambiciosos son los planes que pretende materializar Watt»s en los próximos tres años. La firma -controlada por la familia Larraín- prevé alcanzar ingresos por US$1.000 millones al 2015. En 2012, el grupo comercializó cerca de US$730 millones. «Nos faltan del orden de US$300 millones, lo que implica tratar de sumar ventas cercanas a US$100 millones por año», señaló el gerente general de la compañía Rodolfo Véliz, tras participar en la Junta de Accionistas de la empresa.
El ejecutivo explicó que, además del crecimiento orgánico -que les permitiría incrementar su facturación en cerca de US$40 millones anuales-, la meta implica adquirir nuevas empresas de tamaño mediano. «Nos están faltando compras que nos aporten ventas del orden de 60 a 70 millones de dólares por año», puntualizó.
La política de la compañía ha incorporado justamente una adquisición por ejercicio. En 2010 fue Frugo; en 2011 Wasil, y el año pasado, Lácteos Valdivia. Este 2013 el ritmo continuará. Si bien Véliz no precisó fechas, sí sostuvo que planean comprar nuevas marcas. Agregó que podrían adquirir una empresa que les aporte los dineros necesarios para llegar a la meta de US$1.000 millones o varias.
«Lo ideal es que sea simple, ojalá una empresa, pero si es más, igual estamos en condiciones de absorberla», señaló. Y agregó: «Esperamos este año concretar al menos una adquisición dentro de Chile».
La nueva compra se financiaría con recursos propios. Sin embargo, si la adquisición llega a ser demasiado grande, la firma está en condiciones de materializar un aumento de capital.
Hoy, gran parte de los ingresos del conglomerado provienen del negocio lácteo con marcas como Loncoleche y Calo.
En 2012, los socios sumaron, además, las empresas Lácteos Valdivia a la operación. La planta de esta última -ubicada en la ciudad que lleva su nombre- fue cerrada, consolidando todo el proceso en Osorno. «Hoy estamos haciendo una inversión en la planta de Osorno, unificando allí la producción de quesos. Esa operación debería estar partiendo en un mes más y requiere una inversión de US$ 4 millones», dijo Véliz. «Con eso ya deberíamos estar preparados para seguir creciendo en quesos», agregó.
En su negocio internacional, y tras cerrar su operación en Argentina, el grupo prevé centrarse en Perú. Actualmente, cuentan con una filial en ese mercado vecino, donde comercializan las marcas Laive y Watt»s. Sus ventas han ido creciendo a tasas del 20%, por lo que aspiran a ampliar su capacidad y su logística, concluyó Véliz.
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