La meta es producir 250 millones de litros en 10 años. Para este año, la compañía, que cuenta con 36 lecherías, prevé crecer un 10% e invertir más de US$15 millones.
Manuka es la mayor productora láctea de Chile en una industria con múltiples players. Con 40 mil cabezas de ganado, de las cuales 25 mil actualmente están en ordeña, produjeron al cierre del año pasado 111 millones de litros de leche, lo que implicó un crecimiento de 10% respecto a 2012 y una participación de mercado que ronda el 5%.
“Fue un buen año porque alcanzamos las metas que nos habíamos impuesto y a nivel consolidado los resultados de la compañía mejoraron en torno a un 10%”, dice Juan Carlos Petersen, gerente general de la compañía chilena controlada por capitales neozelandeses, que hace casi una década inició sus operaciones en Chile, y tomó mayor fuerza cuando en 2008 compraron parte de la hacienda Rupanco.
-¿Cuáles son sus expectativas para 2014 en cuanto a producción, venta y crecimiento?
-Este año esperamos crecer nuevamente un 10%. El negocio se ve muy bien, básicamente por el buen volumen de consumo de lácteos que hay actualmente, impulsado además, por las compañías procesadoras y comercializadoras que ofrecen en retail nuevos productos con formatos que tienen más valor.
-¿A cuánto asciende su plan de inversión y en qué proyectos se destinarán?
-Lo destinaremos a fertilización, más praderas, mayor masa ganadera y aumentar el número de nuestras lecherías. Para este año esperamos invertir más de US$ 15 millones. Nuestro plan para los próximos ocho años es invertir por sobre los US$ 100 millones en crecimiento orgánico.
-¿Cuáles son sus metas de producción a largo plazo?
-250 millones de litros de aquí a 10 años más.
-¿Cuántas lecherías nuevas planean construir?
-De las 36 lecherías que tenemos hoy en operación en 22.500 hectáreas de las regiones de Los Lagos y de Los Ríos, queremos llegar a superar las 60. En 2014 tendremos tres nuevas.
Precios
-¿A qué se debe el desacople de precios pagados al productor de Chile versus los de otros países?
-Efectivamente, el precio que están recibiendo los productores chinos es de un 65% más alto que el que reciben los productores chilenos, y el pre-cio que reciben los neozelandeses es un 15% más alto que el de los locales. Sin embargo, esto no fue así en 2012, donde debido al fuerte impulso doméstico, los precios estaban más altos en algunos trimestres respecto a la realidad extranjera. El precio en Chile se fija en relación a cómo está el mercado doméstico y a la paridad entre importaciones y exportaciones.
En Chile el mercado de la compra de leche es competitivo y transparente. Hay que analizarlo en su justa dimensión y no en base a lo que ha pasado en un semestre.
-¿Cómo ve el panorama de precio para este año?
-Excelente. Muy firme. Por tres motivos: porque los inventarios locales e internacionales están muy bajos, porque la posibilidad de importar siempre está y eso generará presión en la realidad doméstica y, finalmente, porque hay un desajuste entre la oferta y la demanda actual que generará estabilidad de precios. Al tipo de cambio y a los precios internacionales actuales, vemos espacios para que el precio al productor suba este año en un rango entre un 7% y 10% a nivel local.
-¿Es importante lo que pase en mercados internacionales como China?
-Los stocks mundiales de lácteos están relativamente bajos y eso determina que en un contexto internacional se tengan precios en torno a los $ 250 por litro. China está importando una cantidad de leche enorme en comparación a años anteriores porque el consumo doméstico está aumentando a tasas de dos dígitos, versus la capacidad productiva limitada que tienen.
-¿Le parece que en búsqueda de mejores precios el porcentaje de exportaciones lácteas debiera ser mayor?
-A nivel país un 85% de los lácteos que se producen en Chile se quedan para el mercado doméstico. Definitivamente hay una oportunidad para exportar más pero a largo plazo, dado el dinamismo del mercado doméstico. El 90% de los lácteos en el mundo se obtienen en base a la alimentación del ganado por granos. El grueso de la producción de Chile se obtiene en base al sistema pastoril, que es más sustentable y competitivo que los granos, por lo tanto a largo plazo hay una oportunidad tremenda para la industria láctea chilena.
Perspectiva de industria
-¿Qué capacidad hay en Chile para crecer en la industria láctea?
-En el sur está la capacidad para multiplicar a largo plazo por cuatro o cinco veces la producción actual de Chile que es de 2,7 billones de litros.
-¿Cómo están los costos de producción en la industria?
-Las heladas impactaron en el pasto e hicieron que retarde su crecimiento, por lo tanto la producción por hectárea de pasto bajó y eso hizo subir los costos de producción en torno a un 9% en 2013.
EL ARRIBO DE NUEVOS ACTORES
Empresas como CCU y Carozzi han hecho público su interés de ingresar al mercado de productos lácteos, por lo que podrían unirse a firmas como Nestlé o Soprole en la compra de leche. Ante esta posibilidad, Petersen dijo que «siempre es positivo que un sector productivo incorpore nuevos players, sobre todo empresas tan importantes como ésas que se están dando cuenta del tremendo potencial lácteo. No me sorprende, porque en Chile el consumo per cápita aún es bajo, llega en torno a los 150 litros, con un crecimiento de 25 litros por persona en los últimos cinco años. De esta forma, Chile convergerá a mediano plazo al consumo per cápita de países desarrollados, con un rango entre 180 y 200 litros por persona anual. Esto sería un crecimiento de un 30%. En Argentina se consume sobre 200 litros per cápita y en Uruguay sobre 230 litros».
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