En el marco de la tercera versión del evento Field Days Chile, la feria de tecnología en innovación agrícola realizada hace unos días en el Recinto Sago por la agencia New Zealand Trade & Enterprise, el experto neozelandés James Allen dictó una charla sobre el manejo de la producción agrícola en períodos de sequía. Pero además se refirió a cómo proteger el ganado y las praderas de las cenizas volcánicas, ambos temas contingentes en la Región de Los Lagos.
En el evento, que reunió a 750 personas, se presentaron 40 marcas de Nueva Zelandia con exposiciones y muestras dinámicas sobre maquinaria, técnicas de riego, cultivo, entre otras, además de 11 charlas técnicas, una muestra de gastronomía típica neozelandesa y un remate de productos.
James Allen, en la charla titulada «Gestión de la sequía-superando tiempos difíciles», relató su experiencia como productor durante la sequía registrada en 2013 en Nueva Zelandia, donde señaló que el fenómeno hizo que la producción lechera cayera 30%, afectó el crecimiento de las praderas en 20% y tuvo repercusiones en el ganado, tanto en el apareamiento como en la producción.
«Pretendemos entregar consejos sobre cómo combatir, tratar y recuperarse de una sequía. Es importante modificar los diseños de los campos productivos para estar preparados ante una próxima sequía. Otro punto importante es el bienestar del productor lechero, la actitud mental que debe tener para afrontar estos periodos difíciles», señaló.
Recomendaciones
-¿Qué relación o similitud tiene Osorno con las zonas afectadas por la sequía en Nueva Zelandia?
-La zona geográfica de Osorno y los alrededores es muy parecida a la región de Waikato en Nueva Zelandia. Allá la sequía de 2013 fue peor que la que sufre hoy Osorno, pero las lecciones que se aprendieron pueden perfectamente ser aplicadas aquí en Chile.
-¿Qué medidas deben tomar los productores locales para enfrentar la sequía?
-Lo más importante es que los productores tienen que tomar decisiones en etapa temprana, mientras más temprano mejor. Por ejemplo, monitorear las aguas lluvias y la humedad del suelo, ésta es una muy buena señal; sacrificar a las vacas con peor rendimiento; adaptar un sistema de ordeña de una vez al día; contar con mayor suplemento alimenticio, vitaminas y sales minerales; parar la producción lechera hasta la próxima temporada, entre otras lecciones que los productores de Nueva Zelandia tuvieron que adoptar.
-¿Qué cuidados o técnicas especiales se pueden aplicar en las praderas?
-Los productores lecheros en Nueva Zelandia aprendieron que es necesario proteger las praderas y eso también se puede aplicar en Chile. Hay dos formas: una es extender el periodo de rotación de ganado en predios y la otra adoptar una postura de cero pasto para dejar que el resto de las praderas se recuperen: ésta se recupera completamente entre 30 a 60 días, pero para ello se necesita invertir en más alimento concentrado para las vacas. En cuanto a resembrar, una buena alternativa es plantar cultivos de verano como achicoria, alfalfa, además de ballica y trébol.
-El sistema de riego es una de las principales dificultades del sector agrícola en la región, ¿realiza alguna crítica a los productores locales con respecto a este tema?
-Los efectos de la sequía pueden ser muy abrumadores para algunos agricultores, por eso hay que pensar en un set de estrategias para enfrentar el fenómeno. Entonces, es necesario que los productores empiecen a pensar en la próxima temporada más que lamentarse por lo que está sucediendo con la sequía. Siempre hay que tener la mirada en el futuro y tomar decisiones ahora. En riego la opción más adecuada para la zona es el pivote central o K-Line, que significa un bajo costo en mano de obra, aunque sí una mayor inversión, por lo cual se debe manejar eficientemente. Algunas soluciones son comprar mayor suplemento para alimentar al ganado; secar a las vacas o parar la ordeña; deshacerse del ganado, sobre todo aquel que no está desempeñándose bien.
-Usted plantea como solución deshacerse del ganado, pero ¿qué pasa con los pequeños productores que no tienen más de 60 vacas y para ellos significaría disminuir un alto porcentaje de su producción?
-Independiente del tamaño del campo, las opciones para los grandes productores como para los pequeños son las mismas. Lo más importante es tomar medidas tempranas, demorar o no tomar acciones ahora puede ser mucho peor en el futuro.
-De acuerdo a la experiencia en Nueva Zelandia y la realidad local, ¿cuánto tiempo nos tomaría recuperarnos de la sequía?
-Si el agricultor es proactivo, es capaz de recuperarse en seis meses. De lo contrario, si el productor no toma decisiones, los efectos de una sequía pueden durar entre dos a tres años. En el caso de las praderas, si no se protegen desde ahora van a tener un mal rendimiento del pasto en las próximas dos temporadas. Y por ejemplo, si el productor no toma acciones en el bienestar de los animales, la condición de las vacas podría afectar la producción por dos a tres temporadas también. Son las consecuencias de no tomar decisiones rápidas.
VOLCÁN
-Con respecto a la reciente erupción del volcán Calbuco ¿qué efectos podría tener en el sector ya afectado por al sequía?
-En Waikato, el año 1995, hubo una erupción donde las pérdidas del ganado fueron de 3%, afortunadamente el área donde hubo erupción era sólo de producción de carne bovina y ovina, por lo que no afectó a la producción lechera. Pero acá, si hay lluvia habrá pocos problemas porque limpiará las cenizas y el crecimiento en las praderas no se verá tan afectado. Por el contrario, si no hay lluvias los animales podrían comenzar a comer ceniza en la pradera y entonces hay que preocuparse, lo ideal sería retirar a los animales de la zona afectada.
Fuente. Austral Osorno
