Más de 7 mil familias que sobreviven en comunidades rurales de Baja California Sur y dependen de sus hatos ganaderos, estarían en riesgo de desaparecer en caso de que el gobierno mexicano firme el Tratado de Asociación Comercial Transpacífico (TPP), con el cual se importaría leche de Asia a precios por abajo del costo de producción que enfrentan los mexicanos, señaló Miguel Ángel Pichini Poloni, integrante de la dirigencia de la Unión Ganadera Regional y del Sistema Producto Leche de la entidad.
El gobierno federal quiere vender leche más barata a los mexicanos más pobres, pero estira la cobija para tapar a unos y nos descobija a otros, dijo, y destacó el peligro de desaparición de comunidades enteras del estado como La Purísima, San Isidro, Cadejé, Los Comondús, San Javier y otras tantas de la zona serrana de Loreto y Mulegé, al igual que los cinco ejidos Ley Federal de Aguas del Valle de Santo Domingo y una importante cantidad de ganaderos del sur del estado que dependen de sus hatos ganaderos ya sea bovinos, o caprinos, mismos que estos en los últimos años están cada vez más diezmados; sería como darnos el tiro de gracia, señaló.
Si el gobierno federal quiere que bajemos el costo de la leche que nos venda más barato el diesel, la gasolina, el crédito y los insumos, y entonces sí que nos pongan a competir con los productores de cualquier parte del mundo; actualmente los costos nos rebasan y la ganadería en el estado ha dejado de ser rentable, pero es la única opción de sobrevivencia para miles de familias del campo; no hay más, dijo.
En ese mismo sentido, lamentó que mientras en los países con los que el gobierno mexicano quiere firmar un acuerdo de libre comercio los ganaderos reciben importantes apoyos para la producción y hasta para la comercialización, en México los recursos para el campo son cada vez más escasos y en cuando se logra acceder a algún programa, son tan raquíticos los recursos que al final se convierten en una pastillita para un enfermo de gravedad.
Por tal motivo, Pichini Poloni se sumó a la demanda del Frente Nacional de Productores y Consumidores de Leche para que el gobierno mexicano detenga las negociaciones con los países del acuerdo Comercial Transpacífico, ya que concretar un acuerdo con ellos seria llevar a las desaparición a más de 150 mil pequeños productores nacionales de leche que están en vías de desaparecer y un millón de vacas que irían «camino al matadero», por la práctica comercial de 4 millones de litros diarios de ‘fórmulas lácteas’ de procedencia extranjera, que entran al mercado sin que las secretarías de Economía y Salud tomen cartas en el asunto por conducto de Profeco y Cofepris.
Sobre ese mismo tema, el presidente del Frente Nacional de Productores y Consumidores de Leche, Álvaro González Muñoz, hizo un llamado al presidente de la república, Enrique Peña Nieto, para que se ponga orden al sistema productivo y comercial de la leche, y pidió, que el titular de Economía, Ildefonso Guajardo, deje de negociar y concertar acuerdos comerciales internacionales a espaldas de los productores mexicanos, a sabiendas de que son ruinosos para la economía de los pequeños y medianos ganaderos lecheros.
González Muñoz señaló que comprar leche en polvo barata en países altamente productores, o es un subproducto de sus industrias de alimentos, o es subsidiado por los gobiernos -es decir, por baratos caen en la práctica de ‘dumping’- lo cual pone en riesgo 350 mil fuentes de trabajo en México, más de un millón de vacas productoras y la desaparición de empresas comercializadoras de forrajes, de maquinaria y equipos y de pequeñas industrias de productos veterinarios.
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