Para esta empresa, lo tradicional no es sinónimo de deficiencia y lo ha demostrado desde que su última mesa directiva tomó el mando. Conoce su nueva etapa.
Ganaderos Industriales de la Leche (GILSA) tuvo que tomar la decisión –por demás complicada– de convertirse en una compañía especializada en productos y servicios agropecuarios para continuar su desarrollo, incrementar sus ventas y, al ser más eficiente, atender mercados adicionales al de la producción de leche.
Su historia inició hace 52 años, cuando un grupo de ganaderos decidió unirse para crecer y comercializar su leche, detonando así la fundación de varias empresas. Una de ellas fue Pasteurizadora Aguascalientes –mejor conocida como Leche San Marcos, marca que llegó a ser de las más importantes a nivel nacional y fue ganando popularidad entre los consumidores–. Posteriormente, en 1973 nació Forrajera de Ganaderos de Aguascalientes (FOGASA). A esta, le siguieron la Unión de Crédito San Marcos en 1976 y Comercial Agrupecuaria de Aguascalientes (AGRIFARM) en 1992.
Muchas personas en el estado todavía relacionan a GILSA con Leche San Marcos, aunque desde hace unos años tomaron caminos diferentes y el corporativo está enfocado en el fortalecimiento de sus otras tres firmas.
La evolución
En 2014, finalizó la separación de Pasteurizadora Aguascalientes. Los trabajadores y asociados pensaron que el grupo desaparecería; parte de la población hidrocálida también lo creyó.
A principios de 2015, un nuevo consejo de administración encabezado por José Vidal de Anda González tomó las riendas. Año y medio después, demostró que el diagnóstico era erróneo: la compañía aumentó sus ventas, volumen de producción y catálogo de productos.
“Me auguraban el fracaso y la ruptura de GILSA en un año. Ahora, tenemos resultados que no se habían dado en treinta años. Hay algunos resultados que nunca se habían visto”, dice Vidal de Anda.
El momento de separación entre el corporativo y Pasteurizadora Aguascalientes permitió que la dirección se cuestionara hacia dónde quería dirigirse. Concluyó que durante 50 años se había prestado demasiada atención a la comercialización de leche y era necesario hacer crecer los otros negocios. Así, comenzó a realizar ajustes desde la implementación de tecnología en los procesos hasta el fomento del sentimiento de pertenencia entre los colaboradores.
“Nos quedamos con el negocio adicional a la leche. Vendemos alimento para el ganado, medicamentos, insumos para la actividad agrícola, equipos de ordeña y agroquímicos. Solo nos falta la comercialización de la leche, todo lo demás lo seguimos teniendo”, comenta el presidente del consejo administrativo.
De la leche al alimento
Aunque mucho del mercado de Ganaderos Industriales de la Leche – GILSA está en el ganado bovino, también produce alimento para becerras, cerdos, caballos, perros y ovejas. Las dietas están diseñadas por nutriólogos especialistas que toman en cuenta las necesidades del cliente para crearlas.
Por ejemplo, si un productor está pasando por una temporada de escasez de agua, se crea un alimento más fresco; si los precios de la compra de leche están bajando, se genera uno más económico, pero que mantenga el rendimiento de los animales.
“Hacemos el mejor alimento posible en México, con las mejores materias primas, los mejores procesos y desde luego, la mejor gente”, asegura Ildefonso Tépole Malagón, director general de GILSA.
El corporativo cuenta con laboratorios de bromatología para realizar el análisis nutricional del alimento y materias primas, y asegurar la calidad de sus productos. Otros de sus laboratorios son los de patología, en los cuales se previene y detecta las principales enfermedades que afectan al ganado.
La especialización de GILSA los llevó a más estados. Antes, casi el 100 por ciento de sus ventas se quedaban en Aguascalientes y algunas regiones de Zacatecas. Hoy, continúa su expansión a Ciudad de México, Michoacán, Estado de México y cualquier entidad que solicite sus productos.
“Todas las empresas del grupo son más eficientes. Tienen mejores resultados en volumen de ventas y contribución marginal”, dice Tépole Malagón, quien advierte que la situación no siempre fue la mejor.
Las personas son el activo más importante
La nueva dirección se encargó de transmitir a sus trabajadores que ellos son cruciales para lograr que el resto de las empresas sobresalga como alguna vez lo hizo la pasteurizadora. Vidal de Anda reconoce que el proceso no fue sencillo y aún no termina. A pesar de eso, está convencido de que las personas son lo más importante de un negocio.
Ese pensamiento ha llevado a que las capacitaciones sean habituales para el personal de GILSA. También, se ha fomentado la convivencia entre directivos y colaboradores.
Camino nuevo, herramientas nuevas
¿Cómo le hace una compañía para superar una crisis y aumentar sus ventas en tan solo un año? Además del capital humano, los socios apostaron por una fuerte inversión en talento, capacitación y tecnología; todo esto sumado a la disciplina de construcción de resultados.
Según el director general, los cambios fueron posibles gracias a la consolidación de un nuevo y decidido consejo de administración, y al perfil de José Vidal de Anda González. “Se arrancó con un presupuesto agresivo, empezamos a pensar diferente, a dar pasos consecutivos y hacer una actualización”, comenta.
Con un solo objetivo en mente –estabilizar a la empresa– se comenzó a tecnificar todos los procesos. Fue una transformación radical: se pasó de no usar nada de tecnología a siempre tomar decisiones basadas en ella.
Actualmente, se toman en cuenta predicciones e indicadores de desempeño específicos. El nivel de rastreabilidad de su producción va desde el momento en que los granos son cosechados en México o en el extranjero hasta que entran y salen de la planta, listos para descargarse del inventario.
Además, su planta está certificada en ruidos, vibraciones, emisión de polvos y limpieza. Ubicada en una zona urbana, puede producir a toda su capacidad conteniendo emisiones de ruido y el tratamiento de agua de sus procesos. Se ha invertido para mejorar la maquinaria antigua, lo cual permitió hacer más eficientes los procedimientos, incluido el consumo de agua y energía.
Cuenta con la certificación NFTA, la Certificación Federal Industria Limpia, OHSAS 18000 y los ISO 9001, 14001 y 22000.
“No porque hagamos algo tradicional tenemos que hacerlo deficiente –dice el director general–. Cuando llegamos a GILSA, hace un año, esta planta solo podía embarcar 450 toneladas diarias, hoy salen hasta 900 toneladas. El crecimiento es muy grande”.
Expoleche, una forma de retribución
Aunque el corporativo ya no se dedica a la comercialización de leche, no olvida sus orígenes. Por eso, una parte importante de su gestión es la de organizar Expo Leche GILSA. A pesar de que no le representa ningún beneficio económico, ve este esfuerzo como un servicio a la comunidad del sector ganadero y agropecuario.
Para los directivos, es la forma en que pueden trasladar el conocimiento y la tecnología a los productores. El evento se organiza cada año y durante tres días se ofrecen conferencias magistrales con expositores de varios países.
La idea del grupo es que el evento crezca hasta igualar a las ferias internacionales (como la Feria Mundial de la Leche en Madison, Wisconsin) y atraer personas de todo el mundo.
“La expo ha ido evolucionando hasta convertirse en la feria de lecheros más grande del país”, dice Vidal de Anda.
No todo es agroindustria
Tal vez uno de los pasos más atrevidos de GILSA fue crear un negocio que aparentemente no tiene nada que ver con la agroindustria: Unión de Crédito San Marcos. Fundada hace 40 años, se ha convertido en el brazo financiero del corporativo.
La empresa sabía que muchos de sus socios, además de dedicarse a las actividades primarias, estaban inmiscuidos en el comercio o la industria. Por ello, decidieron ofrecer servicios financieros, de inversión patrimonial y protección personal.
Su especialidad es la rama agroindustrial, pero el servicio está abierto a todos los sectores. Las opciones van desde los créditos quirografarios, de avío y refaccionarios, hasta los seguros para autos, de vida y gastos médicos.
Es una entidad financiera formal, regulada por cuatro organismos: la Comisión Nacional Bancaria de Valores, la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), el Banco de México y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP). La confianza de sus clientes la devuelve con tasas superiores al mercado y una garantía del 100 en la inversión.
Desde que el nuevo consejo de administración tomó el mando, fueron definidas políticas corporativas importantes dentro de Unión de Crédito San Marcos. Una de ellas fue mantener un porcentaje cero en cartera vencida.
Alimentación para todo, próximo reto
Con la meta de 2015 cumplida, GILSA tiene claro que los siguientes años estará enfocado en alcanzar un crecimiento tres o cuatro veces mayor.
“El grupo estaba muy regionalizado, nuestros planes son expandirnos en otros estados, entrar en áreas que tradicionalmente no atendíamos”, dice Vidal de Anda.
Esas áreas son la producción de alimento para caballos, cerdos, gallos y mascotas. Una prueba de ello es su marca de comida para perros Can Planet, la cual está a punto de entrar a las tiendas de autoservicio. También, planea adentrarse en la agricultura urbana.
Esta expansión podría acercarlo, poco a poco, al mercado de la alimentación humana. La posibilidad que los directivos ven de entrar a esta rama es grande y no se descarta, ya que a fin de cuentas, su negocio es la alimentación y venden productos como maíz, soya y canola, los cuales son la base de la dieta de muchas personas.
Aunque les entusiasma la idea de ampliar el mercado, están conscientes de que la prioridad es crecer las tres empresas. El consejo administrativo y la dirección saben que el camino es largo, pero lo recorrerán con pasos firmes.
Por lo pronto, los Ganaderos Industriales de la Leche, que muchos daban por muertos, han demostrado que un augurio de quiebre se elimina con trabajo duro, innovación e inversión en su gente.
¿Cómo está formado GILSA?
Los productos y servicios que ofrece son diversos. Esta es una breve descripción de los negocios que forman al grupo.
1. Fogasa
Forrajera de Ganaderos de Aguascalientes
Procesa alimento balanceado para ganado, comercializa materias primas y desarrolla fórmulas alimenticias.
Líneas de productos: Mezclas preparadas para todo tipo de ganado y premezclas minerales.
También ofrece asistencia en nutrición animal, laboratorio de bromatología, patología y diagnóstico en salud animal.
Cuenta con la certificación NFTA, la Certificación Federal Industria Limpia, OHSAS 18000 y los ISO 9001, 14001 y 22000.
2. Agrifarm
Comercial Agropecuaria de Aguascalientes
Comercializa insumos e implementos agropecuarios.
Líneas de productos: Agroquímicos, fertilizantes, semillas, implementos agrícolas, equipos y refacciones de ordeña, medicina, nutrición de línea para ganado bovino y caballos, jarcería, ferretería, alimento para mascotas Can Planet.
3. Unión de Crédito San Marcos
Entidad financiera cuyos principales servicios son el crédito, el arrendamiento y la inversión. Se especializa en la rama agroindustrial.
