El nuevo acuerdo ofrece muchas oportunidades para las exportaciones de leche, queso, leche maternizada e ingredientes de productos lácteos, de acuerdo con el Consejo de Exportación de Lácteos de Estados Unidos.
China es ya el mayor importador de productos lácteos del mundo, a pesar de que tiene un consumo per cápita por debajo del de Estados Unidos, Europa e incluso a otros países asiáticos como Japón y Corea del Sur.
En 2014, China puso en marcha el “Decreto 145”, según el cual, los países exportadores se tienen que registrar y tienen que certificar sus instalaciones de lácteos para asegurar que las plantas cumplen las normas chinas de seguridad de los alimentos. El nuevo acuerdo permitirá que las plantas lácteas puedan ser certificadas por terceros, para poder exportar a China.
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