La difícil situación por la que atraviesa el sector lácteo es consecuencia de la confluencia de una serie de factores que han dado lugar a un importante desequilibrio del mercado y una prolongada caída de los precios pagados a los productores. Los profesionales argumentan que esta crisis ha empeorado desde que la Unión Europea eliminara el año pasado la cuota láctea, esto es, los límites de producción lechera por ganadero. Ahora, la oferta se ha disparado y los precios caen.
Las estadísticas revelan que en los últimos años tres granjas lecheras están cerrando cada día en España, lo que supone una tendencia muy negativa para el sector en general. En la provincia de Palencia, según los datos facilitados por la Unión de Pequeños Agricultores, hay unas doscientas explotaciones ganaderas de leche.
Esto se traduce en unos 500 empleos directos y en otros 200 que corresponden a los empleados asalariados. En algunas de estas explotaciones se cubren justo los gastos, pero en otras muchas las perdidas cada vez son mayores. «La Unión Europea ha desmantelado todas las herramientas de garantía y no hay forma de defenderse, por lo que la situación está muy difícil», destaca Domiciano Pastor desde UPA.
«Ahora mismo producir leche solo da pérdidas. Estamos viviendo la peor crisis que ha atravesado el sector vacuno y no vemos salida», argumenta desde COAG David Tejerina.
El responsable de la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos en Palencia va más allá y asegura que el próximo en comenzar a sufrir estas consecuencias es el sector ovino. «Al abaratarse la leche de vaca se utiliza menos la de oveja. En los últimos meses su valor ha bajado en torno a un 25%», asegura.
En esta misma línea se manifiesta el responsable de Asaja Palencia, Honorato Meneses, quien destaca que «esta situación empezó en el sector vacuno, pero está arrastrando al ovino, que es su hermano pequeño».
«El sector estaba perfectamente organizado con unas cuotas, pero Europa decidió desmantelarlo y dejarlo libre, lo que ha agudizado la situación», añade Meneses. «Es lamentable que nuestros profesionales estén viviendo esta situación cuando el 40% de lo que se consume en España se trae de fuera», argumentan desde Asaja.
El coordinador provincial de la Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL), Francisco Salvador, personaliza la situación que atraviesa el sector lácteo en la provincia y destaca que hay una decena de profesionales que están viviendo una «situación límite».
Apunta que hay industrias que están llevando a cabo «prácticas vergonzosas» a cambio de recoger la leche a 15 céntimos el litro. «Hay ganaderos que van a tener que cerrar arruinados. Pedimos a la Junta un esfuerzo para que se recoja la leche o, en su defecto, que se arbitren medidas de apoyo a los ganaderos», añade Salvador.
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