Los fabricantes han negado, al igual que lo hicieran los de Toblerone, que esta reducción del tamaño del producto esté relacionada con el Brexit.
El envase del yogur bajo en grasa Activia, de la marca Danone, ha sido rediseñado en Reino Unido reduciendo así la cantidad de yogur que contenía de 500 a 450 gramos. Pese a ofrecer una menor cantidad de yogur, el producto sigue costando lo mismo: 1,40 libras, unos 1,60 euros.
Este movimiento de la marca ha provocado el enfado de la sociedad británica quien anteriormente ya había mostrado su cabreo tras el rediseño de las chocolatinas de Toblerone. La especulación ha vuelto a establecer al Brexit como principal culpable del rediseño de la marca puesto que la sociedad cree que se trata de una medida de Danone que tiene como objetivo la reducción de costes.
A pesar de que los fabricantes de Danone han asegurado que no tiene nada que ver, cada vez son más las personas que apuestan a que diferentes marcas se están viendo obligados a reestructurar el diseño de sus productos con el objetivo de ahorrar costes.
El Banco de Inglaterra advierte del efecto del Brexit
Un portavoz de la empresa ha asegurado que este rediseño ha sido provocado como parte del relanzamiento de la marca Activia. Según Danone, este nuevo envase implica también un cambio de receta, razón por la que no se ha cambiado el precio del producto. Pese a que el relanzamiento se llevará a cabo durante los próximos días, la compañía asegura que ya se planificó mucho antes del referéndum.
A principios de 2016, el Banco de Inglaterra advirtió a los fabricantes de alimentos que podrían tener que reducir los tamaños de sus productos y utilizar ingredientes más baratos con el objetivo de cubrir el aumento de los costes tras el Brexit.
Danone, tras los pasos de Toblerone
El rediseño del Activia de Danone llega tan solo unas semanas después de que la polémica se desatara por el nuevo diseño de Toblerone. Con el objetivo de reducir sus costes, Toblerone optó por reducir su peso y ofrecer menos chocolate variando su diseño, una medida que ha indignado a la sociedad británica.
Por aquel entonces, la empresa también negó que el cambio estuviera relacionado con el Brexit. Los portavoces aseguraron que simplemente crearon un nuevo diseño ya que el anterior era bastante complejo y costoso. El peso de las barras de 400 gramos se redujo a 360 y el de las barras de 170 a 150 gramos.
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