Productores de la Asociación de Ganaderos de Santa Ana, Asogans, mostraron su inconformismo por la arbitraria decisión de los compradores del lácteo que decidieron bajar el precio por cada litro, en algunos casos sin advertencia previa.
Aunque los productores reconocen que es una maniobra habitual de la industria cuando inicia la temporada de lluvias, dejaron ver su malestar frente a tal determinación.
Wigberto Villamizar Sánchez, vicepresidente de Asogans, señaló que actualmente están pagando a $780 el litro de leche, cuando antes estaba alrededor de $850 y $900. Incluso hay algunos que reciben $650.
“(Los compradores) ya ni le avisan a uno cuando baja el precio. Uno se entera el día que va a cobrar la leche. Ellos sacan sus cuentas, pagan y hasta luego. No le informan a uno desde antes”, criticó el productor.
Villamizar evitó precisar cuáles son las empresas o las personas que reducen el precio de forma arbitraria, no solo porque los asociados del comité le venden el lácteo a quienes ellos deseen, sino porque es una problemática que les ocurre a todos los ganaderos.
El vicepresidente de Asogans explicó que esta determinación los afecta porque la gran mayoría tenía la esperanza de estabilizar su negocio luego de las considerables pérdidas que dejó el verano. Aunque recibieron un mayor valor, la renta se les fue en conseguir alimento y sostener a los animales.
“Uno queda recibiendo lo mismo que en verano. Lo que aumentamos en volumen lo nivelan bajando el precio”, sostuvo.
En época de verano, la producción de leche en general disminuyó entre 50 % y 60 %. Otros ganaderos, como Villamizar, renunciaron totalmente al negocio porque no alcanzaba a llenar ni siquiera una cantina y prefería que los terneros se alimentaran con ese lácteo.
Ahora bien, el inicio de la temporada invernal no significó para ellos un cambio inmediato. Los aguaceros trajeron plagas como el gusano que se comía el poco pasto que brotaba.
El dirigente gremial precisó que la recuperación ha sido lenta, pues aclaró que las vacas no dan leche sino hasta que empiezan a comer con mayor frecuencia y a nivelarse.
“Los compradores son los que imponen el precio. A ellos no les importa lo que diga el Estado. En marzo subieron la leche porque era verano pero no dijeron si era por el aumento que decretó el Gobierno”, declaró.
Roberto Elitín de la Peña, ganadero de la región, fue uno de los pocos productores a los cuales les mantuvieron el precio porque protestó antes de que le redujeran el pago.
“En otras zonas cercanas sí hubo modificación del precio. En época de sequía, los compradores ofrecen una prima de verano y la quitan cuando comienza el invierno”, contó el productor.
Los ganaderos pidieron al Gobierno que ejerza una vigilancia en el precio y que verifiquen que las acopiadoras del lácteo paguen el valor que corresponde.
“Aquí no existe el control de ningún tipo. Ellos (los compradores) son libres de subir y bajar el pago, dependiendo del cliente, de la distancia que tengan que hacer para recoger la leche. Más bien en eso, manejan el precio mirando qué tan cerca o qué tan lejos está el predio”, remató de la Peña.
http://www.contextoganadero.com/regiones/denuncian-reduccion-en-el-pago-de-la-leche-en-magdalena
