Nuevamente las empresas del sector lácteo se vieron las caras -a través de sus abogados- en una de las aristas que las mantienen en posiciones enfrentadas.
Se trata de la consulta que Watt’s realizó en junio ante el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC) respecto de las condiciones de recepción y compra de leche fresca y en particular, de la publicación de la pauta de precios pagados a los productores.
Esta consulta, cuya audiencia de revisión se realizó ayer, tiene su origen en una sentencia del TDLC de 2004, en que se solicitó a las empresas que en ese entonces tenían un posición dominante en el mercado (Soprole, Nestlé y Watt’s) transparentar los precios y promociones que mantenían con sus productores, a modo de mantener la información del mercado.
Pero pasados 14 años de dicha sentencia, Watt’s insiste que mantener esta decisión genera una asimetría regulatoria, dado que de hecho la compañía ha perdido posición de mercado y que, en oposición, Colun lidera la industria, pero por ser una cooperativa y estar integrada verticalmente, no se considera parte del mercado, lo que a su juicio no es sino operar igual que en el modelo de la industria, ya que “Watt’s también compra la totalidad de la leche a sus productores, indicó el abogado de la compañía, Benjamín Grebe.
Por esto, Watt’s solicitó que “se empareje la cancha” para todos los actores de la industria, ya sea que todos informen sus pautas de precio o bien, se elimine dicha norma, señaló Grebe, quien agregó que además Colun se beneficia de la exención tributaria de primera categoría, así como sus cooperados, por ser una cooperativa.
“Esto genera una ventaja para esos productores lecheros cooperados de hasta un 44,5% de beneficio si se les compara con un cooperado de otras cooperativas o con un inversionista de sociedades”.
Ante dicha interpelación, Colun, a través de su abogado José Manuel Bustamante, arremetió contra Watt’s, señalando que dicha compañía ha iniciado una campaña en contra de Colun “desde principios de este año, atacando los principios de asociatividad y del cooperativismo en Chile”.
Bustamante agregó que la consulta de Watt’s caracteriza el mercado de forma ligera, sin considerar las importaciones, siendo que éstas equivalen al 35% de leche cruda, en circunstancias que Colun no compra leche importada y sólo se abastece de lo que entregan sus cooperados.
Además, el abogado enfatizó que Watt’s “no sabe qué es lo que busca” con la consulta, dado que esta partió por las pautas de precio, pero luego se centró en la crítica hacia la estructura de la cooperativa. “No entiende qué es Colun ni cómo funciona”, manifestó, señalando que la empresa está formada por pequeños empresarios y no por grandes patrimonios, como se ha querido hacer creer.
Por el lado del gremio productor expuso el expresidente del TDLC Tomás Menchaca, quien afirmó que “es evidente que se trata de una consulta totalmente instrumental”, que busca disminuir la responsabilidad que recae sobre las empresas, dada las discriminaciones de precio en la que incurren con sus productores.
Agregó que permitir la publicación de precios para todos los actores aumentaría los riesgos de coordinación entre los mismos, dado que tendrían mayor información para tomar decisiones estratégicas.
Tras las exposiciones, la ministro María de la Luz Domper consultó respecto de las condiciones en las que se puede ser cooperado de Colun, respondiendo el abogado que se paga una cuota de $2.750, valor que se paga cada 10 litros, no existiendo un mínimo de cuotas para entrar. Agregaron también que no existen trabas ni para la entrada ni para la salida de la cooperativa, así como tampoco la exigencia de una estadía mínima dentro de la misma.
