En las partes bajas del municipio de Choluteca nunca antes los ganaderos habían enfrentado escasez de alimentos y agua para los animales. Piden a las autoridades del gobierno apoyarles para construir reservorios.
La sequía mantiene preocupados a los ganaderos de la zona sur. Y es que en varios sectores se ha comenzado a reportar escasez de alimentos para los semovientes a causa de la baja producción de pasto que se reportó en los potreros durante el año pasado. Debido a esta situación, los campesinos dedicados a este rubro se han quedado sin reservas de alimentos para enfrentar el actual verano. En sectores como Montecillo, San José de la Landa y Los Marranos, zonas consideradas como bajas y donde siempre se ha contado con abastecimiento de agua y comida para los animales, este año la situación es similar a la que enfrentan los ganaderos de las partes altas o secas.
En esta zona permanecen unos 50 pequeños y medianos ganaderos, entre ellos Pedro Mondragón, quien aseguró que para evitar la muerte de los animales han tenido que recurrir a hacer uso de alimentos que anteriormente no le proporcionaban al ganado. “La situación es crítica, para lograr mantener a las reses hemos tenido que pedir a los cañeros que nos regalen los restos de caña y al igual con las empresas meloneras”, dijo Mondragón. El utilizar la fruta como alimento para las vacas, según el entrevistado, les preocupa porque los animales se acostumbran a este tipo de comida y enfrentarán problemas cuando no les regalen el producto o cuando no haya producción en la zona. La falta de agua es otro de los problemas que aquejan a los productores de esta zona luego que bajara el caudal de la mayoría de los pozos de donde se abastecían.
Mondragón menciona que en su caso ha tenido que acarrear agua desde varios kilómetros de distancia para sostener a su ganado.
“Aquí tenemos un pozo que apenas nos da botes con agua, eso es lo máximo que podemos sacar y es insuficiente para los animales que nosotros tenemos”, aseguró.
La situación que enfrenta Mondragón es similar a la que ha enfrentado Cornelio Solano, quien tiene que llevar sus animales al río. “El problema que hay aquí es que el agua del río está contaminada, por lo que tenemos que vigilar bien a donde vamos a llevar el ganado a tomar agua, porque de lo contrario se nos mueren los animalitos”, expresó Solano.
El problema de abastecimiento de agua obligó a otro ganadero, Rómulo Paz, a invertir unos 25,000 lempiras en la perforación de un pozo, el cual le permite dotar de agua a su vivienda y los animales que posee. “La situación es crítica y lo que realmente nos preocupa es que faltan los meses más difíciles del verano, por lo que no descartamos que puedan haber pérdidas de ganado”, manifestó Paz.
Baja producción
La falta de alimentos y agua ha generado una baja en la producción de leche, la principal actividad de sustento para las familias del sector. Se estima que en la zona permanecen unas 1,000 cabezas de ganado, de las cuales unas 400 producen leche. Por animal se están obteniendo cuatro botellas de leche, menos del 50 por ciento de la producción de invierno. En esta región durante el invierno se producen 4,000 botellas del líquido blanquecino. Los productores realizaron un llamado a las autoridades de la Secretaría de Agricultura y Ganadería para que les apoyen con la construcción de reservorios de agua.
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