Un manto de incertidumbre sobre SanCor

La empresa sólo admitió formalmente haber iniciado un proceso de reconversión.
Share on twitter
Share on facebook
Share on linkedin
Share on whatsapp
Share on email

Y no desmiente versiones sobre cierre de plantas y despidos. El ruralismo santafesino la acusó de darle la espalda a los tamberos.
La última palabra oficial de Sancor sobre su situación financiera, expresada en un comunicado difundido el 8 de marzo, sólo confirma la suspensión de actividades en algunas de sus plantas por falta de materia prima, en el marco de un “proceso de reconversión y reestructuración iniciado tiempo atrás”. Aquel comunicado, además, aclaraba que por la confidencialidad que requieren las gestiones y negociaciones en marcha sólo habría nuevas notificaciones “a través de los canales oficiales habituales” cuando “surjan definiciones al respecto”.
Sin embargo esta semana abundaron los trascendidos periodísticos. El más resonante, publicado en el diario Clarín, anticipó el supuesto plan de reestructuración de la cooperativa. Entre los puntos más sensibles se mencionó el cierre definitivo de cuatro plantas y el despido de 1.000 empleados, así como el pago de la leche de febrero en 10 cuotas y la de marzo a 30 días. También el diario La Nación difundió la presunta decisión de la cooperativa de vender su industria, mientras seguían sucediendose reuniones con el gobierno nacional y ATILRA, el gremio de los trabajadores de la industria láctea. Desde la empresa no desmintieron ninguna.
Repercusiones locales
A la espera de definiciones, ruralistas y funcionarios provinciales hicieron sus apreciaciones. El Secretario de Lechería, Pedro Morini, admitió que sólo manejaba la información institucional de Sancor aunque le pareció verosímil el supuesto plan de reestructuración. “Yo creo que puede ser un informe creíble”, indicó a LT10 Radio UNL, y consideró que “quizás algunas fábricas se puedan refuncionalizar como cooperativas o encontrar comprador”. Aunque sobre los probables despidos sí pareció tener información: “en algunos casos son jubilaciones adelantadas o arreglos particulares”. También indicó: “hasta ahora no se de nadie que tenga un telegrama de despido”.
Por su parte el presidente de Carsfe, Gustavo Vionnet, arremetió contra la cooperativa al acusarla de conspirar contra los propios productores. “Lamentablemente Sancor jugó siempre en contra de los tamberos argentinos al aliarse en el CIL (Centro de la Industria Lechera), bloqueando toda posibilidad de reconvertir la lechería nacional, que hoy está en un estado desastroso por no acordar con la producción una política de negocio útil para todos y solo para un eslabón”, también declaró a la emisora universitaria.
El dirigente ruralista estimó que la decisión de diferir el pago de la leche de febrero empeoraría aún más la situación, agravando la escasez de materia prima que hoy es el principal problema de Sancor. “No se quien va a quedar vendiéndole la leche a la cooperativa”, anticipó, y si bien deseó que pueda reconvertirse y retomar la normalidad consideró: “es muy probable que caiga”.
En quiebra
Vionnet analizó que la empresa apenas está trabajando con 1.5 millones de litros diarios de leche con capacidad para elaborar 5 millones, lo que le da una relación de menos de 400 litros por cada uno de los 4000 empleados que ocupa, mientras en el mundo -dijo- las empresas competitivas operan entre 5.000 y 10.000 litros por operario. “Ojalá la puedan reconvertir y poner en marcha, a nadie le conviene que desaparezcan empresas importantes; pero las empresas también tienen que hacer sus esfuerzos”, sostuvo, y recordó que Sancor recibió “enormes” ayudas del Estado y “nunca hicieron la reconversión necesaria”.
Sobre los puestos de trabajo en riesgo, respondió como representante de los productores: “en los últimos años se cayeron cientos de tambos, cientos de familias que se quedaron sin trabajo y fueron a engrosar los pueblos y la necesidad de asistencialismo político; ya se vienen perdiendo miles de puesto de gente que trabaja en el territorio y a eso nadie le presta atención”.
“Lamentablemente las cooperativas se pusieron del lado de la gran industria láctea, que hizo de los tamberos la variable de ajuste”, reiteró el dirigente, quien además advirtió que con una caída superior al 20%, la producción nacional apneas alcanzaría para abastecer el consumo interno, quedando “muy expuestos a importaciones de los supermercados”. Y finalizó: “estamos quebrando la lechería argentina y mientras tanto todo el mundo mira para otro lado”.
Asistencia demorada por la burocracia
Los créditos blandos de $2.000 por vaca para los 1.300 tamberos afectados por las inundaciones, que fuera dispuesto a través de la ley que creó el Fondo de Inversión y Desarrollo de Santa Fe, aún no están disponibles. Pero podrían estarlo en los próximos días, según declaró al programa ADN Rural de Rafaela el Secretario de Lechería provincial, Pedro Morini. “Estamos creando la Unidad Ejecutora, cuyo decreto se firmará esta semana (por la que pasó), luego de sancionada la Ley que creó el Fondo. A lo mejor, pecamos en decirle a la gente (a principios de febrero) que el crédito iba a salir en 15 días y la verdad es que los tiempos de la política son los tiempos de la burocracia mientras que los tiempos del campo son los tiempos de la naturaleza. Pero estamos muy cerca de empezar a poner operativos los créditos; es una cuestión de días”, le dijo al programa radial rafaelino.
http://www.ellitoral.com/index.php/diarios/2017/03/18/laregion/REG-04.html

Mirá También

Así lo expresó Domingo Possetto, secretario de la seccional Rafaela, quien además, afirmó que a los productores «habitualmente los ignoran los gobiernos». Además, reconoció la labor de los empresarios de las firmas locales y aseguró que están «esperanzados» con la negociación entre SanCor y Adecoagro.

Te puede interesar

Notas
Relacionadas