Por Elida Thiery – Tan de moda está el uso de datos en el sector lechero, que ayer desde la provincia de Santa Fe se conoció un detalle interesante. El Observatorio Laboral del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social de la provincia determinó en su último relevamiento que la evolución del empleo registrado en Santa Fe creció 0,7 por ciento el segundo trimestre, con la generación de 3.646 puestos de trabajo más que en el comparativo interanual.
En lo que la gestión socialista define como un “escenario de contención y crecimiento del empleo registrado”, se destacó el avance en cuanto al rubro de la construcción, de la mano de la obra pública, pero con un detalle en cuanto al sector industrial donde SanCor aporta la variable saliente.
Las manufacturas concentran al 23,2 por ciento del empleo registrado total, con 115.209 puestos en Santa Fe en el período analizado, siendo uno de los sectores con contracción a causa de un cambio de criterio.
SanCor Cooperativas Unidas Limitadas generó un cambio de domicilio fiscal y con esto el reporte laboral pasó de Santa Fe a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
La cooperativa figura ahora con domicilio en la Capital Federal, en vez de en Sunchales, como fue históricamente, por lo tanto y a pesar del esquema de retiro voluntario, la contracción numérica en el segmento no se debe a una “destrucción” de puestos de trabajo, sino al modo y lugar de información del caso, reduciendo así la base de datos santafesina.
Más allá de informe oficial, EDairyNews pudo saber que este cambio obedece a cuestiones netamente formales, en cuanto a declaraciones y trámites legales, ante organismos tales como AFIP, entre otros. De todas maneras, toda la estructura y las gerencias siguen funcionando como lo hacen desde siempre desde la ciudad de Sunchales.
Seguramente al respecto se podrán leer muchas elucubraciones sobre esto, pero que no responderán más que a la serie de desatinos que cierta prensa interesada en perjudicar a la cooperativa tiene desde hace varios meses, con versiones infundadas de venta, o conjeturas nada sólidas al momento.
Mientras el Gobierno se envalentona con la reforma laboral, que podría incluir a Atilra, SanCor sigue aguardando por los 250 millones de pesos prometidos por la Nación de un fondo que tuvo al momento un único desenbolso. Atada la ayuda al difícil acuerdo con el gremio lechero, la mayor cooperativa argentina le da pelea con herramientas propias a una coyuntura cada vez más compleja donde la política se entromete y los elementos climáticos complican aún más el panorama.
De aquella “semana que viene” de la que hablábamos tiempo atrás, para resolver este caso y otros pendientes de la lechería, aún no se tiene novedad alguna.
Elida Thiery
