Dos meses después de haber recibido el primer adelanto de $ 200 Millones acordado con el Gobierno Nacional en el marco del programa Fondear, desde la Cooperativa SanCor aún esperan que se complete el segundo desembolso, paralizado y sin vistas de concretarse, al menos en el corto plazo.
La situación parece repetir la tensión vivida meses atrás, cuando la empresa parecía quedar como rehén de una negociación entre el Gobierno Nacional y la entidad gremial en la que finalmente se modificó el famoso “aporte solidario”, convertido en la llave para destrabar el crédito.
Ahora, el asunto pasaría por avanzar en la modificación del convenio colectivo de trabajo de la industria láctea, compromiso asumido en aquella ocasión, pero que difícilmente pueda arrojar resultados convenientes a todas las partes en un plazo inmediato. Menos aún, si se tiene en cuenta el inminente proceso electoral, la renovación de autoridades gremiales prevista para los primeros días de agosto y la negociación de paritarias que habitualmente este rubro realiza por el mes de setiembre, lo más probable es que no haya definiciones de fondo antes de fin de año.
Mientras tanto, SanCor sigue subsistiendo y completando las formalidades impuestas desde Nación para encarar la nueva etapa en la que, indefectiblemente, deberá conseguir un aliado que capitalice la empresa.
Por un lado, con un leve incremento de la producción se logró mejorar la actividad en el mercado interno, recuperando el buen posicionamiento de la marca. Además, se consiguieron fondos adicionales con operaciones de exportación y liquidación parcial de mercadería que se conservaba como garantía. Y, luego de la autorización dada por la Asamblea, se avanzó con la negociación para vender las cuatro plantas aunque todavía no hay resolución al respecto.
Según fuentes de la empresa, también prosperaron los análisis con las tres principales opciones de asociación: Fonterra (Nueva Zelandia), Lala (México) y Lactalis (Francia). Si bien la cooperativa de capitales neozelandeses parece ser la más interesada en el proyecto, todavía no hay ninguna decisión tomada y se seguirán evaluando todas las alternativas. Incluso, se conocieron otras iniciativas provenientes de fondos de inversión suizos, chinos y árabes, aunque estas opciones fueron calificadas como “poco viables”.
Las mismas fuentes dieron a entender que en las próximas semanas podrían iniciarse las negociaciones formales con las empresas interesadas, en el marco del proceso denominado due diligence, una especia de auditoría legal tendiente a facilitar información para los posibles compradores.
