Luego de la asamblea general del miércoles pasado se abren varios interrogantes sobre cómo continuará la relación del gremio con las industrias y con el Estado. Muchos rumores circulan sobre las razones de un conflicto que se avecina y hay demasiadas dudas sobre si son posturas declarativas o las partes están realmente decididas a actuar.
Repasemos algunos de esos interrogantes que deberíamos respondernos:
¿Es cierto que hace un tiempo prolongado que el sindicato conoce que van por ellos?
¿Es correcto que desde la máxima autoridad del poder se comunicaron con otro (nuevo) Nro. 1 de la Industria láctea para avanzar en un nuevo convenio?
¿Será verdad que las principales industrias acordaron apoyar medidas para un nuevo convenio?
¿Es cierto que un ministro nacional, le solicito al P.E. un gap de $ 500 para negociar por el aporte solidario (actualmente está en 3.000)?
¿Qué ocurre si la causa que las pequeñas y medianas empresas sostienen en la justicia en contra del sindicato, sale favorable a estas?
¿Es cierto que se homologaría el último acuerdo, pero se extendería hasta fines del 2017?
¿La inusual dureza sindical en el último paro nacional, se debe a que «alguien’ conocía estos argumentos?
Las repuestas a estos interrogantes, se irán conociendo en el tiempo (o no)
Damián Morais
