Con la tranquilidad que le dio el respaldo en las urnas, el Gobierno puede a partir de ahora seguir desarrollando sus planes para combatir la pobreza, ajustando detalles y avanzando para concretar la promesa de bajar el precio de productos básicos de la canasta familiar como la leche, la carne, la verdura y el pan.
Lácteos San Luis, que busca llegar a la mesa de todos los puntanos con la leche un 35% más económica que la que se ofrece en el mercado, es uno de los más avanzados. Sobre todo porque ya está cerrado el acuerdo con los tamberos locales que van a proveer el fluido y continúa la construcción de la planta en el Parque Industrial, donde van a industrializar la leche, que saldrá a la venta con marca propia, tanto en sachets como en el envase tetra pack.
Antes de las elecciones, el ministro de Medio Ambiente, Campo y Producción, Sergio Freixes, había recorrido las instalaciones de lo que será la Usina Láctea provincial, en el viejo galpón que pertenecía a la empresa Sintoplom, ubicado en el Parque Industrial Sur. “No hay un proyecto similar en todo el país. El Ejecutivo provincial está realizando un esfuerzo enorme para que todos los puntanos puedan acceder a la leche a un valor más barato”, sentenció el funcionario.
Sobre la construcción, responsables de la empresa constructora de origen santafesino explicaron que “la obra civil tiene un avance del 60%.
El 40% restante consiste en la instalación de la maquinaria. Estamos conjugando dos aspectos: el lado constructivo y el aspecto tecnológico. Lograr combinar eso no es nada sencillo”.
Freixes conoció en detalle la disposición de los distintos sectores, así como el funcionamiento que tendrá la Usina Láctea. Además, dialogó con los tamberos sobre el rol de cada uno y el beneficio que traerá el proyecto a la provincia.
“Viendo el interés que mostró el Ministro, renovamos las expectativas y nuestra ilusión. Esta obra es un orgullo para los tamberos y los ciudadanos de San Luis”, destacó el productor lechero Enrique Delfino, quien posee su tambo en la localidad de Concarán y fue uno de los impulsores del proyecto junto con Emilio Emer (dueño de un establecimiento en Estancia Grande), Martín Pasman (Luján) y Germán Taranco (Punta del Agua), entre otros.
Delfino, quien también inauguró en su tambo una procesadora de alimento balanceado que ayuda a la alimentación de las vacas, expresó que productores de Santa Fe, Córdoba y Buenos Aires le manifestaron su admiración respecto al proyecto: “No han visto algo parecido a lo que estamos haciendo en San Luis”, concluyó.
Otro de los proveedores lecheros será el tambo El Rosario, de la firma Foralba, a cargo del cordobés Martín Pasman. “La expectativa es enorme. Que la leche se produzca en San Luis, se procese afuera y vuelva a la provincia como pasa en la actualidad no tiene sentido. Poder hacerlo en forma conjunta, entre Gobierno, industria y tamberos es excelente”, recalcó.
La nave modelo donde se levanta la Usina Láctea contará con tecnología de última generación y el mejor diseño para la manipulación del producto. En primer lugar se colocará la ensachetadora, que es el envase flexible por litro que se comercializará en toda la provincia y luego se instalará el equipamiento para la fabricación de envases tetra pack, que además de diversificar la venta permitirá llegar a todos los colegios públicos a partir de 2018 con leche de calidad para el consumo de los alumnos durante ambos turnos. Este sistema permite conservar el producto hasta 30 días sin que se corte, lo que facilitará la distribución aún en los establecimientos más alejados.
Como parte de las obras, también habrá un depósito de producto terminado, una sala de envasado -que tendrá ambiente controlado para evitar cualquier tipo de contaminación- y un laboratorio microbiológico y fisicoquímico para analizar los productos de manera permanente.
