Si bien Brasil compró en el primer cuatrimestre más volumen, el país caribeño cotizó mejor sus importaciones. El 87 por ciento de esos embarques fue leche en polvo.
Las exportaciones de lácteos no atraviesan un buen momento. Si bien las industrias del sector tienen disponibilidad de leche para procesar, los precios internacionales a los cuales se realizan las ventas están por debajo de los registrados un año atrás.
Esta situación –en un contexto inflacionario, retenciones a las exportaciones y un tipo de cambio estable– ha reducido los márgenes del negocio.
En los primeros cuatro meses del año, los embarques de productos lácteos argentinos sumaron 105 mil toneladas, 10 por ciento menos que lo enviado en el primer cuatrimestre de 2014, cuando el volumen alcanzó a 117 mil toneladas.
Sin embargo, la caída mayor se refleja en las divisas generadas por esas operaciones. Los 391,78 millones de dólares vendidos en el año representan una caída del 27,3 por ciento respecto de los valores FOB (en puerto) cobrados en igual período de 2014, según datos oficiales. Mientras que entre enero y abril de 2014 el valor FOB promedio de la tonelada exportada alcanzó a 4.590 dólares, en el período actual llegó a 3.660 dólares, 20 por ciento menos.
Venezuela y Brasil
En este escenario de magnitudes reducidas para el comercio exterior, Venezuela sigue siendo el principal cliente para los lácteos argentinos.
Si bien en lo que va del año Brasil encabeza la lista en volumen adquirido (26.346 toneladas, por encima de las 17.450 entre enero y abril de 2014), Venezuela es el destino que genera los mayores ingresos. Sus 24.138 toneladas adquiridas generaron un valor FOB total de 118,33 millones de dólares, 22 por ciento más que lo facturado entre enero y abril de 2014, cuando hacia el país caribeño fueron 17.450 toneladas por un valor de 96,7 millones de dólares.
Más allá de este incremento en volumen y en ingresos totales, el valor FOB promedio de cada tonelada exportada fue 11 por ciento menor. Entre enero y abril de 2014, el valor de cada mil kilos de lácteos fue de 5.541 dólares, contra 4.900 dólares pagados este año.
Perfil del comercio
Los acuerdos bilaterales suscriptos entre ambos gobiernos y los negocios particulares cerrados por las empresas han hecho de Venezuela el principal comprador de leche en polvo. De las 24.138 toneladas compradas hasta abril, 82 por ciento fueron de este producto, por un valor total de 98 millones de dólares.
Brasil es el país que tiene las compras más diversificadas en cuanto a productos. Además de leche en polvo, el vecino país compró en lo que va del año dulce de leche (299 toneladas), helados (252), manteca (145) y es el principal comprador de Mozzarella, con 1.561 toneladas. Rusia, por ejemplo, es el principal destino para los quesos argentinos, al igual que manteca.
A diferencias de lo que ocurre con las autorizaciones para exportar trigo y maíz, que dependen de un cupo asignado por el Gobierno, los lácteos presentan una mayor fluidez en los permisos. De acuerdo con la página de la Unidad de Coordinación y Evaluación de Subsidios al Consumo Interno (Ucesci), los “ROE blancos” se autorizan casi de forma inmediata. Hubo firmas, como el caso de Sancor, que presentaron la solicitud de permiso el 29 de mayo y tuvieron su autorización el 3 de junio. En un escenario de mayor producción de leche, desde las empresas aseguran que los permisos de ROE salen sin problemas, más allá de que las operaciones que se realizan ofrecen escaso incentivo comercial.
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