Argentina: Robótica en el #tambo. Transfiriendo información al productor

Share on twitter
Share on facebook
Share on linkedin
Share on whatsapp
Share on email

El proyecto de investigación liderado por la Dra Jago tuvo como objetivo evaluar si el AMS (robot) podía integrarse a los sistemas pastoriles de producción lechera típicos de Nueva Zelandia.
Un pequeño y creciente número de productores son pioneros en el uso de la tecnología de ordeño automático en Nueva Zelandia en una amplia gama de sistemas de producción y tamaños.
Hay reportes internacionales contradictorios referidos al impacto del ordeño automático sobre la mano de obra. La experiencia en Nueva Zelandia es que hay un cambio sustancial en las tareas, con un uso más flexible de las horas de trabajo, más monitoreo y menos trabajo manual, pero no necesariamente una reducción de las horas de labor totales.
Al respecto cabe señalar que en un establecimiento con AMS, más tiempo es empleado en el control y mantenimiento de equipos, entrenando vacas, arreando pequeños grupos de vacas y controlando vacas que aparecen en los listados de atención, con una reducción en el trabajo físico.
Los AMS están diseñados para operar 24 hs/día y, por lo tanto, un componente esencial de la tecnología es el monitoreo remoto, el cual envía señales de alerta a teléfonos celulares cuando hay un problema técnico o con alguna vaca. En este sentido, deGier (WCDS Advances in Dairy Technology, 2010, Vol 22: 295-307) sostiene que la mayor desventaja del AMS es que uno está siempre alerta esperando el llamado del equipo y nunca sabe si su trabajo diario ha finalizado.
Financieramente, los AMS tienen mayores costos de capital y mayores costos operativos (mantenimiento, uso de electricidad y agua) comparados con los sistemas de ordeño tradicionales.
Un reciente análisis exhaustivo de los registros financieros de 63 tambos alemanes usando AMS y 337 con ordeño tradicional reportó que:
No hubo diferencias entre los dos sistemas en el total de equivalentes horas-hombre empleados, concluyendo que finalmente no hubo sustitución de trabajo por capital, como se había hipotetizado.
Los costos de energía eléctrica y agua fueron 29,5% mayores en los tambos con AMS. En tal sentido, es ampliamente reportado que los costos de capital, operativos y de mantenimiento son mayores para AMS comparados con los sistemas tradicionales.
Los sistemas automatizados de ordeño se han integrado en una amplia gama de sistemas de producción en Nueva Zelandia. Sin embargo, una reducción en los costos de capital y operativos, y/o significativasventajas en cuanto ala mano de obra, son requeridas para que haya una adopción más ampliade esta tecnología.
Fuente: INTA Rafaela

Mirá También

Así lo expresó Domingo Possetto, secretario de la seccional Rafaela, quien además, afirmó que a los productores «habitualmente los ignoran los gobiernos». Además, reconoció la labor de los empresarios de las firmas locales y aseguró que están «esperanzados» con la negociación entre SanCor y Adecoagro.

Te puede interesar

Notas
Relacionadas