Estos son los productos que se dejaron de consumir ante la creciente inflación, según el relevamiento realizado por el Centro de Almaceneros de Córdoba.
Entre los indicadores de comportamiento de consumo de los clientes de almacenes y autoservicios de Córdoba, surgen los productos de la canasta básica alimentaria que sufren mayor impacto en la disminución de su compra. Entre ellos se encuentran los lácteos y panificados.
En una comparación mensual (julio-agosto) surge que la leche en saché bajó 2,45 por ciento su consumo; el yogur bebible, 1,78 por ciento; el queso cremoso, 2,15 por ciento; quesos duros y especiales, 7,32 por ciento; y flanes y postres en potes preparados, 9,60 por ciento.
Si la comparación es interanual (agosto 2013-agosto 2014), el consumo de leche en saché cayó 21,90 por ciento; el yogur bebible, 24,30 por ciento; el queso cremoso, 3,20 por ciento; quesos duros y especiales, 12,43 por ciento; y flanes y postres en potes preparados, 31,30 por ciento.
Con productos derivados de la harina ocurrió lo mismo. En relación con julio, el pan criollo se compró un 3,64 por ciento menos y las facturas y especialidades lo hicieron en un 4,05 por ciento menos. No obstante, los clientes consumieron más pan francés o mignón, en un 2,15 por ciento.
Si la comparación es interanual, este mes se consumió 14,23 por ciento menos de pan criollo y 19,85 por ciento menos de facturas. El pan aumentó su consumo 20,25 por ciento respecto del año anterior.
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