Esther Fasciano es una tambera que se movilizó hasta el ministerio de Agricultura, y denunció acciones sospechosas en torno a la protesta que hizo hoy la MNPL.
Tamberos nucleados en la Mesa Nacional de Productores de Leche se hicieron presentes frente al ministerio de Agricultura. Allí, los productores repartieron al público leche con información adherida al cartón para que el consumidor sepa la diferencia de precios entre lo que cuesta la materia prima y a cuánto se vende el producto elaborado en góndola. Además, una de las manifestantes, la santafesina Esther Fasciano, denunció maniobras sospechosas de parte del Gobierno alrededor de la protesta.
Fasciano, en primer lugar, destacó el valor de haber movilizado productores desde sus lugares de origen hasta la Capital Federal: “Para nosotros la protesta tienen efecto e impacto social porque, si lo hacemos en nuestro territorio, no tenemos la prensa necesaria para que se magnifique y que el país conozca la realidad”.
Para la tambera, “hay productores que no asisten por miedo a la ciudad y a las persecuciones del mismo gobierno”. Sobre este último punto, aclaró: “No ha bajado el ministro a atendernos, pero sí se han encargado de mandar personas a sacar fotos y eran mandados por el gobierno. Se encargan de identificar a los que estamos ahí. Eso hace que la gente tema a esta situación”.
“(En la marcha) estaba la MNPL, la Mesa de Enlace y Caproler, de Entre Ríos. La representación estaba y fue buena, había dirigentes de distintos puntos de todo el país. Lo que queríamos lograr era mostrar lo que venimos reclamando. Hace años que venimos diciendo que necesitamos un precio razonable. El aumento de góndola fue 330%, (mientras que) el precio del litro de leche, 170%. Hoy deberíamos estar cobrando 3,2 pesos por litro y lo hacemos, en los mejores casos, a 2,1 pesos”, añadió.
Otro aspecto que golpea fuertemente a la actividad tambera es la sequía. “Es grave, porque venimos de años muy secos y no tenemos la suficiente humedad en superficie. Estamos por el sexto mes sin lluvia. En el norte de Santa Fe hay necesidades para el consumo humano (sic), en localidades como Santa Margarita, Gato Colorado y Villa Minetti”, declaró.
De cara al futuro, aseveró: “Estuve en la toma de plantas del año pasado pero nos duele hacer eso. Lo único que podríamos llegar a hacer es no ordeñar más y no nos queda otra”.
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