Hace menos de un año empezó a exportar commodities al gigante asiático. Y ahora ya vende productos con marca propia. El director de Relaciones Institucionales, Sergio Montiel, explica cómo desarrollan el negocio.
A menos de un año de que empezara a exportar a China, SanCor selló un preacuerdo para exportar al gigante asiático leche larga vida, en envases pequeños y de un litro, con tapa a rosca, teniendo como antecedente inmediato el lanzamiento de fórmulas infantiles. El gerente institucional de la firma, Sergio Montiel, explica cómo están dando ese salto de exportar commodities a vender con marca propia a los chinos
– ¿Cuál es la idea de exportar con valor agregado pero también con productos finales?
– Hay muchos productos que por el grado de elaboración pasan a ser commodities, como el caso de la leche en polvo en bolsas de 25 kilos. Lo que nosotros estamos haciendo es agregarle la marca, que ya es reconocida desde hace mucho tiempo a nivel mundial, pero ahora en mercados que son absolutamente nuevos para nosotros y que tienen un potencial de crecimiento realmente formidable.
– ¿Qué obligaciones impone llevar adelante un procedimiento de estas características? ¿Hay que trabajar en marketing?
– Nosotros como antecedente inmediato, y en particular con la de China, tenemos el lanzamiento de las fórmulas infantiles. Es un mercado que tiene un crecimiento exponencial en China y en todo el sudeste asiático. La particularidad que tienen es que por algunas circunstancias que ellos vivieron con algunas empresas que comercializaban fórmulas adulteradas, son muy estrictos en la calidad del producto, en los ingredientes que lo componen y en el aseguramiento de esa calidad. Eso trajo como aprendizaje un duro proceso de poder elaborar productos con nuevas fórmulas. Fue una experiencia muy positiva porque salimos adelante gracias a la capacidad de nuestros técnicos de poder dar cumplimiento a todas esas exigencias.
Lo mismo pasa con las otras leches, que van a ser producidas en la planta industrial que vamos a inaugurar a mediado de septiembre en la localidad de Chivilcoy. Vamos a inaugurar una planta de gran tecnología a nivel mundial, y ya antes de arrancar la planta estamos disponiendo de productos elaborados para el mercado interno elaborados y también para el mercado internacional.
– ¿Qué peso puede tener este negocio en el comercio exterior? ¿Es una apuesta fuerte la que están haciendo en el mercado chino?
– Estamos dando pequeños pasos pero lo más seguro posibles. Para nuestro negocio pueden ser significativos, pero para China son migajas. Con el tiempo vamos a ir ganando seguridad y volumen, con la cual va a tener una repercusión importante. Transformar hoy un producto altamente volátil -como la leche en polvo- para nosotros va a ser muy importante para SanCort y para la lechería argentina.
– Recuerdo el aporte de capitales venezolanos para la reactivación de SanCor. Supongo que eso debe tener compromisos de abastecimiento. ¿Es un negocio que se sostiene a lo largo del tiempo?
– Hay dos partes. Por un lado está la operación financiera por la cual ellos nos prestaron u$s80 M a pagar en 12 años con leche en polvo. Eso se viene cumpliendo, puesto que ya llevamos cancelados unos u$s23 M desde el 2008 y se extiende hasta 2020. Son volúmenes no muy significativos, pero por otro lado nosotros tenemos una operación comercial con Venezuela. Es un mercado muy interesante, pero hay que saber llevarlo y tiene sus condicionantes. Tiene beneficios y contratiempos.
– ¿En Brasil cómo están en materia de competitividad?
– Estamos con una subsidiaria desde 1985 en San Pablo, que abastece el mercado de San Pablo y el sur de Brasil. Tenemos productos específicamente desarrollados para el mercado brasilero con packaging en portugués y atendiendo a las necesidades de los consumidores brasileros. Tiene sus variaciones de acuerdo al tipo de cambio o determinadas actividades que desarrolla el gobierno cuando los productores brasileros le piden algún tipo de protección sobre la producción local . Sigue siendo muy importante, y uno de los mercados a atender de manera prioritaria. Tenemos que diversificar mercados, algunos en sociedad y otros en soledad, pero creando un marco de seguridad para vel desarrollo de la actividad.
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