A través del Ministerio de Agricultura, se impulsan políticas de incentivo para el desarrollo de la producción –centralmente en cooperativas y pymes– y la apertura de nuevos mercados para la exportación de productos lácteos, elaborados con valor agregado.
Las políticas de incentivo para la producción agropecuaria que promueve el Estado Nacional, tienen como objetivo aumentar la competitividad y ofrecer alimentos de alta calidad para el mercado nacional e internacional. Entre las diferentes herramientas de fortalecimiento, se destaca la creación de un Fideicomiso Financiero para la lechería, cuya meta es facilitar el acceso al crédito a los productores primarios de leche, cooperativas y PYMES lácteas.
Actualmente, la industria láctea argentina está compuesta por unos 11.500 tambos y más de 900 empresas del sector, que generan puestos de empleo para 100.000 trabajadores. En este marco, desde la cartera agropecuaria nacional, que conduce Carlos Casamiquela, y a través de la Subsecretaría de Lechería, se han impulsado durante el último tiempo, distintas medidas e instrumentos que tienden a la transparencia en la relación entre los actores de la cadena láctea, principalmente productores y operadores lácteos.
En primera instancia, se decidió hacer una prueba piloto con el cooperativismo lácteo argentino, y se estima estructurar un Programa Global por un monto de hasta $ 1.500 millones, en series de $40 y $ 60 millones aproximadamente.
Con la modificación del mercado de capitales y la obligación para las compañías de seguros, se busca dinamizar la economía y sumar participantes a la Bolsa de Comercio, valiéndose de ésta oportunidad que brinda el Estado Nacional y la Subsecretaria de Lechería, quienes ofrecen un instrumento para que los sectores pequeños de la cadena láctea que necesitan financiamiento, puedan entrar al Mercado de Valores y ser elegibles para inversión.
PROGRAMA ARGENTINO DE PRUEBA DE REPRODUCTORES BOVINOS DE LECHE (PROAR) Otro aspecto que vale resaltar de la política fomentada desde el Gobierno Nacional para el sector lácteo, es la importancia y continuidad del Programa Argentino de Prueba de Reproductores Bovinos de Leche (PROAR), que tiene como eje lograr una mayor productividad de los rodeos lecheros en el país.
Además, PROAR verifica la calidad de la genética en los bovinos para mejorar la producción de los sectores lechero y vacuno. Argentina cuenta con 1.800.000 vientres para pruebas de progenie que serán comparados con sus contemporáneos nacionales e internacionales.
Este Programa se enmarca dentro de los objetivos de agregar valor en origen, crear una industria de producción de genética, de impacto local y regional y desarrollar nuevos mercados. También cabe mencionar que es único en su tipo en América Latina y relevante para un sector lechero, cada vez más ávido de tecnologías que permitan aumentar la eficiencia de producción y durabilidad de los rodeos lecheros.
Mediante un trabajo conjunto, el PROAR es el rentar sultado de la interacción entre entes Públicos, Privados y Académicos: Ministerio de Agricultura – Asociación Criadores de Holando Argentino (ACHA); Cámara Argentina de Biotecnología de la Reproducción e Inseminación Artificial (CABIA); y la Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires (UNCPBA), para el desarrollo de actividades tecnológicas, de investigación y de capacitación.
Como parte de la política integral, se busca avanzar en otros aspectos, como en la búsqueda de información para el sector lácteo, con un Sistema de Control Lechero Nacional que eventualmente incluya la totalidad de los tambos del país, lo que significará poder contar con información altamente confiable sobre la situación actual y las tendencias dentro de la lechería.
En tanto, el subsecretario de Lechería, Arturo Videla, remarcó que “es un Programa que establece una Política de Estado de mediano y largo plazo, y generará un impacto de significación para el sector”.
Las políticas de incentivo para la producción agropecuaria que promueve el Estado Nacional, tienen como objetivo aumentar la competitividad y ofrecer alimentos de alta calidad para el mercado nacional e internacional.
Actualmente, la industria láctea genera puestos de empleo para 100.000 trabajadores
El Argentino
