A partir de la muy buena exposición efectuada en Expoagro, sobre la situación de la lechería argentina, presentada por la Mesa Nacional de Productores de leche, me motivé a profundizar la investigación al respecto, la que como conclusiones me permitió ratificar los datos vertidos y ampliar en consideraciones concordantes.
Por: Aldo Norberto Bonaveri
@AldoBonaveri
Desde hace más de 18 meses, el productor lechero viene clamando por una recomposición del precio que cobra por la leche a diario. La industria alega que no está en condiciones de mejorarlo, argumentando para ello la baja operada en los mercados internacionales a partir de mediados de 2011, de la leche en polvo, que es el patrón que regula los valores de los lácteos. Y por otra parte, los argentinos advertimos como los precios en góndola no dejan de subir.
Todos estos datos tienen algún asidero, por lo que es importante efectuar un análisis concienzudo sobre causas, efectos y resultados.
Con las diversificaciones propias de cada fábrica y, considerando que estás abonan precios diferenciados en función de volúmenes entregados, lo más ecuánime es tomar el valor promedio a nivel país, en tal sentido los datos consultados nos indican que el promedio de febrero es de $ 1,65 por litro. Ello marca una mejora del 5% respecto a diciembre de 2012.
Si bien es ilustrativo recordar la evolución de los precios internos, hablar de valores nominales nos puede llamar a engaño. El valor actual en términos reales sólo puede ser comparado con los pisos anteriores de los últimos diez años, registrados en enero de 2003 y julio de 2009. Siendo oportuno señal que el momento más favorable para el tambero ocurrió en julio de 2010, con un valor equivalente a $ 2,50 de estos días.
Para interpretar mejor el cuadro de situación, siempre es conveniente contemplar las diferentes variables que repercuten en el mercado, en tal sentido la evolución de la cotización de la leche en polvo resulta insoslayable (ver cuadro)
Los vientos en contra para la lechería argentina quedan evidenciados con la performance de la producción. En 1999 se produjeron 10.329 millones de litros, una abrupta caída nos llevó a tocar fondo en 2003 con 7.951 millones de litros, correspondiendo acotar que en 2002 la tonelada de leche en polvo llego a venderse a u$s 1.250. Resultando importante remarcar que recién en 2011 se llegó a superar el ordeñe de 12 años atrás, marcando entonces el magro récord de 11.206 millones de litros. Aquí cabe hacer una reflexión, necesitamos más una década para crecer tan solo un 9,55%.
Claro está que los datos aislados tienen un valor relativo, por ello que es válido observar lo que evolucionó la producción en Latinoamérica entre 1999 y 2011. El crecimiento es encabezado por Guatemala 79%, seguido por Perú 72%, Venezuela 70%, Bolivia 65% y Brasil 63%. Pero no son los únicos países los que incrementaron la producción, ello se verificó en 21 estados del continente, cabiendo destacar que de estos los menos eficientes fueron El Salvador y Panamá con 15 y 16% respectivamente.
Estos guarismos solo se explican por el desmedro sufrido por el sector tierra adentro.
El gran problema radica que en términos reales el costo de producción se ha disparado al precio de venta. Esa ecuación no es nueva, pues el saldo negativo ha prevalecido en los últimos 5 años. Prácticamente neutro en enero de 2008, se torna negativo durante dos años exactamente (por entonces se aplicaban retenciones móviles a la leche), el rumbo se invierte tenuemente por 12 meses, para quedar equipado durante el primer semestre de 2011, pero desde entonces y hasta la fecha cada vez se expresa en forma más adversa. Para la consultora Márgenes Agropecuario hoy cuesta $ 2,17 producir un litro de leche. Calculando que desde 2008 a la fecha el mismo ha subido un 176% (20% en dólares sólo en último semestre), mientras en el mismo lapso lo percibido por el productor creció un 95%.
Otro dato insoslayable es cuanto recibía el productor en Febrero de 2011 $ 1,49 y dos años después $ 1,57. Vale decir que nominalmente 10,73% más. Mientras que el sachet de leche paso de $ 4,07 a $ 6,30 = a 54,79% más. Pero el cálculo lo efectuamos con el queso cremoso el aumento llega a 63% (de $ 63,90 a $ 39,20)
El trabajo realizado por la Mesa Nacional de Productores Lecheros da cuenta de un cuadro comparativo, de los valores percibidos en dólares por productores por leche cruda en 4 países de la región. El mismo expresa que Argentina u$s 0,33, Uruguay u$s 0,38 (15,15% +) , Chile u$s 0,40 (21,21% +) y Brasil u$s 0,43 (30,30% +). No obstante que las diferencias son marcadas, ellas no expresan la magnitud del contraste, habida cuenta que en los tres países referenciados el dólar es el mismo para vender que para pagar los insumos, en ninguno de ellos hay inflación en dólares, ni mercado paralelo. Hoy Argentina tiene un tipo de cambio semejante al que imperaba antes de estallar la convertibilidad.
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