Aseguran que existen más de 400 cheques rebotados que alcanzarían a una deuda superior a los dos millones de pesos. El problema comenzó a gestarse en mayo y hay productores que aseguran que están “malvendiendo bienes y animales para poder sostener el tambo” y que no caiga su cuenta en los bancos. Ofrecen un crédito a los productores para monetizar esa deuda.
El rumor que nació a mediados de mayo cuando algunos productores vieron como los valores emitidos por Cotapa S.A., la sociedad mixta compuesta por el Estado provincial y los tamberos vinculados, comenzaron a rebotar en las entidades financieras adquirió la figura de bola de nieve a tal punto que hoy los productores se encuentran en situación “dramática”, como ellos mismos lo definen, y hoy se ha convertido en un verdadero intríngulis financiero sin solución inminente llegando a más de 400 cheques rebotados.
Esto conformaría una suma incierta, pero algunos aseguran que la empresa láctea debió ser intervenida accionariamente por el Estado estaría hoy con una deuda con los proveedores y productores que supera los dos millones de pesos, y sin solución de continuidad a la vista.
“Mi situación es muy delicada, gravísima. Estoy en este momento en calle Almafuerte malvendiendo una camioneta de 215 mil pesos en 120 para poder tener algo de liquidez para sostener la cuenta en el banco, sin contar que ya vendimos animales y tractores porque la deuda que tiene Cotapa con nuestro tambo anda cerca de una deuda de los 420 mil pesos, de los cuales 140 mil están en cheques que ya fueron rechazados, y el resto no tengo idea de lo que puede pasar”, aseguró a Dos Florines Luis Martínez, un productor de la zona de El Palenque que se muestra muy angustiado por su situación.
Esta situación estaría afectando a más de 100 productores y proveedores, que han contratado los servicios de un abogado para que los represente ante una situación muy compleja.
El profesional Emilio Fouces, informó a Radio La Voz que un grupo de tamberos “está iniciando acciones legales por la emisión de cheques de la nueva Cotapa SA, que han sido rechazados por falta de fondos”; Serían alrededor de 400 cheques los emitidos y a la espera de cobro, según información que manejan los mismos tamberos; También “le han ofrecido a los productores que saquen créditos por el monto de la deuda, que las empresa los pagaba, pero nadie firma nada y el productor es el único responsable”, añadió.
PROBLEMAS.
Martínez aseguró que el mayo los productores vieron que algo no venía bien, pero que “les resulta muy difícil salir de la empresa” por cuestiones operativas, pero también porque la consideran propia y confían en que se convierta realmente en una plataforma que no sólo pueda recibir la producción local sino que sea efectivamente precio de referencia. Cotapa estuvo pagando 1,53 pesos, pero en algunos casos se estima que los cheques se emitían a 60 días, obligando a los productores a contar con una espalda diferencial. Se estima que habría unos dos millones de cheques por rescatar y que aún no han vencido que se suman a los que ya deberían estar informados ante las autoridades financieras.
En el caso del productor de El Palenque, entrega unos 3 mil litros a la empresa mixta, y empezó a ver cómo rebotaban sus cheques por un lado y cómo el mismo banco le obligaba a cancelar sus compromisos para mantener sus cuentas.
Cotapa estaría hoy trabajando con un flujo de unos 100.000 litros que llegan de unos 110 productores que siguen conformando la cooperativa que tiene una parte minoritaria de la sociedad anónima.
“En el Banco Nación me ofrecieron comprarme el 50 % de la deuda para conmigo pero con un crédito del que yo mismo era el tomador y el fiador al que llaman ayuda solidaria, por lo que cualquier problema que pudiera tener la empresa en el futuro me obliga a mi a pagar el crédito con el cual cobraba mi deuda. ¿Se entiende?. Es una locura, y lo peor que algunos productores ya lo están haciendo obligados por la delicada situación por la que atraviesan”, asegura Martínez. El hecho también es confirmado por un dirigente cooperativo del interior que recibió la misma propuesta.
Ante la consulta de este medio, los productores aseguran que confían en la capacidad y honestidad de Marcelo Ferrer, presidente de Cotapa S.A., pero entienden que la situación se le escapa. Sin embargo, se estima que el financiamiento de la empresa está viniendo por este día del lado de los productores, y que los empleados estarían cobrando sus salarios al día.
Roberto Schunk, en declaraciones realizadas días atrás, aseguro que están “esperando los fondos de la Nación, pero venimos con problemas desde que nació la misma empresa. Nosotros pusimos el empeño en la empresa por una cuestión social, por ayudar a los tambos pequeños. Son más de cuatrocientas familias que hoy estan viviendo de Cotapa», añadió. «Además, tenemos 126 trabajadores con un promedio de edad de 49 años. Si esta empresa quebraba, todos estos trabajadores quedaban en la calle, y no iban a tener de dónde cobrar, por un concurso realizado en 2006. Si la empresa quebraba, la mayoría de los trabajadores y tamberos perdían su laburo, no se iban a poder jubilar, y no tenían ningún respaldo patrimonial para cobrar». «Es cierto que hoy estamos con dificultades, pero cuando hicimos la asamblea, la mayoría nos dijo que estaban dispuestos a seguir poniendo el lomo para que la empresa siga adelante», expresó Schunk.
DIFICULTADES.
Los cheques rebotados serían mayormente de dos bancos nacionales, y todavía no se tiene certezas que puede pasar con los productores que van viendo cómo se debilita su situación comercial, sin poder dejar de extraer leche, sin posibilidad de dejar de vender a Cotapa y sin poder monetizar su producción ya que los cheques vienen siendo rebotados consecutivamente.
“Yo tengo dos meses y medio de producción que no los he podido cobrar, y a mi los costos de este tiempo los tuve que pagar y no tengo ingresos, y hasta se está deteriorando mi situación familiar. Ojalá yo podría aguantar a la empresa porque la siento mía y que esto sea sólo un mal paso, un mal momento y que a partir de mañana normalizamos y nos damos la mano y seguimos laburando como siempre. El tema es que no veo que esto se así, y yo tengo que salir a comprar gasoil fiado para poder funcionar”, asegura el productor.
El abogado Fouces expresó que “está iniciando acciones legales por la emisión de cheques de la nueva Cotapa SA, que han sido rechazados por falta de fondos”; Serían alrededor de 400 cheques los emitidos y a la espera de cobro, según información que manejan los mismos tamberos; También “le han ofrecido a los productores que saquen créditos por el monto de la deuda, que las empresa los pagaba, pero nadie firma nada y el productor es el único responsable”, añadió. Fouces fue consultado en primer lugar por los productores lecheros que ubican su producción con la empresa Cotapa. “Se ha complicado mucho la situación. Cotapa es una vieja empresa insignia paranaense, que hace unos años comenzó con problemas, y en el 2010, el gobierno provincial con el apoyo del gobierno nacional decidió tomar intervención y formar una Sociedad Anónima”. “Con una gran inyección de optimismo, los tamberos vieron esto como una gran alternativa, se tecnificaron, invirtieron, y hace 30 días, están teniendo el problema de los cheques rechazados de los pagos que han recibido de la cuenta corriente de Cotapa S.A. por la leche que han entregado”, advirtió. “No son cuentas de la provincia, pero sí es la que tiene la mayor parte de capital”.
MERCADO.
El problema de Cotapa no es de está década, sino que lo arrastra de al menos los años ’90, recordándose en el mercado la ayuda de 2,5 millones de pesos/dólares que Sergio Montiel extendiera en su momento del Fondo de Promoción Cooperativa.
Para algunos asesores, productores y especialistas, Cotapa no es viable ya que posee una capacidad de producción de más de 200 mil litros y sólo ocupa el 50 %, con tecnología vetusta y con un esquema que no logra encajar en un mercado altamente competitivo donde hace pie financiero en yogures y postres. Mientras la competencia apuesta a los especialitys, Cotapa sigue subsumido en la comercialización de commodities.
Además tiene un costo operativo muy alto ya que posee 126 empleados afiliados a Atilra con sueldo que ronda los 8 mil pesos cada uno por la gran antigüedad en el trabajo que la gran generalidad posee. Sólo de salarios y aportes patronales la empresa demanda más de 1,5 millones mensuales. Está claro que operativamente es deficitario y en este camino en algún momento dejaría de pagar a alguien, y en este caso le tocó a los productores.
Fuente: Gustavo Sánchez Romero / Dos Florines
