Argentina: Congelada, la #leche pierde liquidez

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Más allá de las restricciones comerciales, a los tamberos y a la industria les preocupa la suba de los costos, que acrecienta las deudas en la cadena.
Mientras espera la llegada de la primavera, que marca el ingreso a su etapa de mayor producción, a la lechería no le gusta cómo se ve en la foto.
Con un mercado internacional que emite señales de precios en baja y con el Gobierno nacional amenazando con que no va a permitir exportar cuando la leche en polvo cotice por debajo de los cuatro mil dólares la tonelada, la cadena láctea está mostrando además problemas de liquidez.
Durante el último remate de la Global Dairy Trade, la plataforma comercial de la empresa neozelandesa Fonterra que sirve de referencia internacional para los precios de los lácteos, la leche en polvo cotizó a 2.800 dólares la tonelada.
Es un valor muy por debajo de los cuatro mil dólares que la Secretaría de Comercio Interior fijó como piso para autorizar futuras exportaciones.
Por ahora, la mayoría de las operaciones que aún debe cancelar la industria se pactaron por encima del umbral impuesto por el Ministerio de Economía, pero el futuro no es para nada adulador.
Los contratos que vienen reflejan que el precio actual se mantendría hasta enero de 2015. Muy lejos de los cinco mil dólares de comienzo del presente año y que la industria también se vio imposibilitada de aprovechar, en gran medida, debido a una caída en la producción de leche.
Costos sin cuidar
Las expectativas comerciales de corto plazo para las usinas exportadoras están centradas en su participación en la licitación para proveer lácteos a Argelia. El mercado africano fue el segundo en importancia para los productos argentinos durante 2013 y en los primeros seis meses del presente año trepó al primer lugar.
Más allá de lo seductora de la propuesta comercial, los industriales reconocen cierto temor a tomar un compromiso de provisión que después, por restricciones en los ROE, no puedan cumplir.
Pero lo que más preocupa a la industria láctea no es el escenario internacional. Lo que la aflige es la falta de liquidez que tiene el negocio interno, a raíz de la inflación que erosiona sus ingresos y el corset que sujeta a los precios mayoristas, siempre bajo la atenta mirada del Gobierno nacional.
Los productores también transitan por ese desfiladero, debido al endeudamiento al que tuvieron que incurrir durante los meses de sequía para mantener sus establecimientos en marcha.
Si bien la relación “insumo- producto” entre el valor del litro de leche y el maíz ha mejorado en los últimos tiempos, debido a la baja en el cereal, los otros ítems que componen la estructura de costos se mantuvieron dentro de una espiral ascendente.
El eslabón comercial parece manejar con algo más de alivio esta situación, al menos por el lado de los lácteos. Es que más allá de la contribución que realizan las grandes bocas al Programa de Precios Cuidados, el resto de los productos tiene margen de actualización.
Por Alejandro Rollán
www.lavoz.com.ar/

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Así lo expresó Domingo Possetto, secretario de la seccional Rafaela, quien además, afirmó que a los productores «habitualmente los ignoran los gobiernos». Además, reconoció la labor de los empresarios de las firmas locales y aseguró que están «esperanzados» con la negociación entre SanCor y Adecoagro.

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