Es gracias al repunte de la demanda de quesos
Las usinas concentradas en leche en polvo siguen en problemas.
Algunas industrias lácteas comenzaron a mejorar los precios de la leche pagada a tamberos de la mano de una recuperación de la demanda de quesos tanto en el mercado interno como externo.
El precio de referencia abonado por La Suipachense a tambos de la zona oeste bonaerense con una producción de 8000 litros diarios subió a 2,90 $/litro en febrero versus 2,85 $/litro en enero de este año, según datos informados por la Cámara de Productores de Leche de la Cuenca Oeste (Caprolecoba). Las pymes queseras de la zona, en el mismo período, también subieron a 2,80 desde 2,75 $/litro.
Las grandes empresas lácteas, en cambio mantienen los valores planchados. La filial local de Nestlé el mes pasado pagó en promedio 2,75 $/litro a tambos grandes pero luego de derribar los precios en un rango de 2,45 a 2,47 $/litro durante cuatro meses. Mastellone Hnos y SanCor lo mantuvieron en 2,51 y 2,55 $/litro respectivamente (ver gráfico).
A mediados de 2015 muchas empresas lácteas comenzaron a bajar los precios mayoristas de los quesos –fundamentalmente los blandos– para quemar excedentes de manera rápida. Y la demanda local –tanto familiar como de pizzerías– no desperdició la oportunidad.
La demanda internacional también despegó con los menores precios: en lo que va del presente año 2016, por ejemplo, las exportaciones argentinas declaradas de queso mozzarella fueron de 8460 toneladas versus 4070 toneladas en el mismo período de 2015.
En cadenas de supermercados de grandes urbes argentinas aún es posible encontrar queso mozzarella a un precio minorista (con IVA incluido) de liquidación de 69 $/kg, mientras que los productos de primera marca superan los 170 $/kg.
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