Ayer se dio una nueva ronda de la subasta electrónica de lácteos de Fonterra. El Global Dairy Trade mostró un sostenimiento de cifras a nivel general, por eso el porcentaje de fluctuación fue cero por ciento con valuación en promedio de 2.339 dólares por tonelada.
Los motivos están muy vinculados al hecho de que a principios de esta semana, ASB, un banco de futuros lácteos, se sugirió que los precios de la leche entera en polvo iba a comportarse de esta forma, sin embargo, fue una de las de mayores bajas, junto a la manteca en polvo (-6,6% con 1.695 dólares por tonelada), ya que la baja en este commodity fue 4,5 puntos porcentuales, llegando a mitad de año a 2.118 dólares.
Los principales impulsores de esta ronda de negocios que se da desde Nueva Zelandia, fueron el queso cheddar (+ 6,9%) y la grasa de leche anhidrida (+ 4,4%), la leche descremada en polvo (1,5%) de la subasta anterior.
Los investigadores y analistas con la Red Internacional de Comparación Agrícola (IFCN) sostienen que la demanda de leche superará la producción de leche en 2016 en todo el planeta.
En términos de equilibrio del mercado, los investigadores dicen que durante los dos últimos años la producción de leche ha superado la demanda y a su vez, las existencias de productos lácteos se han consolidado.
En cuanto al análisis de la oferta mundial de leche en base a estimaciones de la IFCN, los investigadores muestran que la producción de leche crecerá un 1,5% en 2016, que dicen que es sustancialmente inferior a 2015 (+ 1,8%) y 2014 (+ 3,2%), sobre la base de una expansión que está por llegar, ya que no fue el caso en los primeros cinco meses del año.
De esta manera, los precios siguen muy cercanos al rango que se tenían en noviembre pasado, con lo que crecen las expectativas de más recortes si las ganancias no aparecen. Cabe poner de relieve el pronóstico de la Comisión Europea en cuanto a la producción, donde estiman una caída de 0,4 por ciento entre abril y diciembre, al igual que sucediera durante 2015, lo cual podría operar como un leve alivio para el sector lechero, donde hoy y por un tiempo más, la producción seguirá perdiendo ganancias, en el 85 por ciento de los casos de los tamberos del viejo continente.
Con estos pronósticos para los productores argentinos las perspectivas no son muy alentadoras, ya que más allá de lo que marque el exterior, la caída productiva no se podrá compensar con precio, a pesar de las reglas básicas económicas, porque la demanda de productos está muy baja y complicada de revertir teniendo en cuenta la inflación reinante y que demandará más tiempo para poder frenar en su constante ascenso.
Ayer en el INDEC se dieron las cifras oficiales del Nivel General del Índice de Precios al Consumidor para la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y los partidos que integran el Gran Buenos Aires, que son el parámetro inicial de esta gestión, donde se registró en el mes de mayo una variación de 4,2 por ciento, con relación al mes anterior. Dentro de este espectro, Alimentos y Bebidas han tenido una variación específica del 3,7 por ciento, siendo en particular los productos lácteos los que tuvieron un comportamiento importante para el alza general.
Costos más altos
Según un informe de la revista Márgenes Agropecuarios, el poder de compra de los tamberos sufrió un fuerte deterioro en el último año por los precios «que se han quedado atrás» frente a la suba de la mayoría de los costos, respecto a la capacidad de compra del litro de leche que en mayo 2016 versus mayo 2015 «muestra una ecuación compleja que lleva a muchos tambos a zona de quebranto».
En mayo de 2015, con un precio de la materia prima en 36 centavos de dólar el litro, con 303 litros de leche el productor podía comprar una tonelada de maíz. En mayo pasado, en tanto, con una leche en 22 centavos de dólar le hacían falta 877 litros, un 190% más.
El maíz, insumo clave en los tambos, estaba en 109 dólares la tonelada y pasó a US$ 193 la tonelada.
Para la energía eléctrica, en mayo de 2015 con 0,21 litros de leche el tambero pagaba un kwh. Ahora requiere 0,71 litros, más de un 230 por ciento de incremento.
«No es solamente una cuestión derivada de la devaluación sino también de aumentos en el precio del maíz (por baja a cero de retenciones y eliminación de Roes) y de una inevitable actualización de las tarifas eléctricas», señala el informe.
Si se ve el caso de la alfalfa, el año pasado con 27 litros de leche se adquiría un kilo de esa forrajera. En mayo de 2016 se pasaron a requerir 39 litros de leche.
Según Márgenes Agropecuarios, con un precio para la leche de 28 centavos el litro (4 pesos) en junio de 2016, «la ecuación mejora, pero sigue en terreno negativo respecto a la situación vigente en mayo/15». Solo la urea granulada y el glifosato se han abaratado, un 6 y 2%, respectivamente.
Compensaciones
Las cifras no ayudan y los tiempos del Estado tampoco. La llegada de estos dos feriados, de mañana y el lunes, también vienen a complicar la agenda de pago de las compensaciones que debían haberse completado esta semana.
Los pagos que se iniciaron y completaron hasta el inicio de la titularidad de CUIT hasta el «Ma», llegaría a una segunda etapa para terminar el abecedario a partir del próximo martes, con lo cual se abonaría la promesa de subsidio para la leche del mes de febrero, en los primeros tres mil litros por explotación, con un aporte de 40 centavos por parte de la Nación y otros diez centavos desde las provincias de Santa Fe, Córdoba y Entre Ríos.
El planteo que hacemos siempre desde este rincón y sabiendo que aún restarán los pagos correspondientes a similares condiciones para la materia prima producida en marzo, es que todo el dinero invertido desde la Nación con esta herramienta de ayuda, no logra concretar cambios en la realidad de los productores, por su condición espasmódica de efectivización y en definitiva, solo queda en eso la colaboración en medio de tanta crisis lechera, que tendrá horizontes promisorios a futuro, pero nada cercanos.
http://www.diariocastellanos.net/noticia/a-nivel-global-los-lacteos-tienen-precios-estables-menos-la-leche
