Los datos preliminares del BCV proyectan caída de 8,3% en el sector
Las cifras preliminares del Producto Interno Bruto (PIB) que presentó el Banco Central de Venezuela en su balance de fin de año dejó en evidencia la critica situación en que se encuentra el sector lácteo nacional.
De acuerdo con esos resultados, se prevé que la producción de lácteos en el país cayó 8,3% en el cuarto trimestre de 2012 respecto a igual lapso de 2011.
El desempeño de la industria procesadora de leche y productos derivados fue afectado el año pasado por limitaciones en materia prima y el aumento de los costos en un entorno de precios congelados.
La leche cruda quedó fuera del alcance de las plantas procesadoras, pues el precio al que se cotiza la materia prima no puede ser costeado con los precios controlados de los productos terminados.
Aunque el litro de leche a puerta de finca está fijado en Bs 3,50 (incluyendo los incentivos de frío y calidad) el precio real del mercado está entre Bs 4,50 y Bs 5 por cada litro. Esto ha limitado la recepción de leche en las empresas, que sólo compran lo necesario para mantener las plantas funcionando.
La leche nacional ha tenido que ser desviada hacia las queseras artesanales que sí pueden pagar el precio de la materia prima, porque los productos no están sometidos al control final de precios.
Durante todo el año el sector lácteo solicitó al Ejecutivo que revisara las estructuras de costos y fijara nuevos precios para la leche pasteurizada y los quesos, con el fin de reactivar la producción. Sin embargo, el 2012 concluyó sin respuesta oficial ni ajustes.
El procesamiento de leche pasteurizada está estancado en 1 millón 200 mil litros diarios desde hace tres años, porque no hay suficiente leche.
Asoprole declaró la semana pasada que están pagando unos Bs 4,8 por el litro de leche cruda, mientras que la leche pasteurizada (900 mililitros) está regulada en Bs 5,83, por lo que pierden entre 8% y 9% por cada litro que procesan.
La producción de leche de larga duración (UHT) también está limitada por la falta de materia prima, el control de precios y, además, porque el mercado está abarrotado de producto importado y le resta mercado a la producción nacional.
Por su parte, Aniquesos ha manifestado que se requieren garantías de materia prima y nuevos precios para que pueda crecer la producción nacional que, según las estimaciones del gremio, se redujo 40% durante este año.
Mientras el aparato productivo se deteriora, el mercado se satura con productos importados. La leche de larga duración y los quesos entran al país sin control y con autorización del Ejecutivo por lo que compiten de manera desleal con la producción nacional.
El sector espera que durante los primeros meses de este año que comienza se realicen los ajustes pertinentes.
ANGIE CONTRERAS C. | EL UNIVERSAL
